La Triumph Rocket III fue lo máximo en cuanto a cubicaje en el mundo de la moto. Pues ahora volverá con ¡más cilindrada!
Como todos sabréis, la Triumph Rocket III contaba con un gigantesco motor tricilíndrico de 2.300 cc, lo que era lo más grande jamás montado en una moto de serie. Además, como su propio nombre indica y la tradición de la marca obliga, este motor era tricilíndrico, por lo que contaba con tres cilindros de ¡más de 750 cc cada uno!
Así, su porte, sus sonidos estética eran impresionantes y marcaron un estilo. La idea de Triumph fue seguir la estela de esas preparaciones americanas artesanales de motos con gigantescos motores de Chevrolet V6 y V8 y coches similares (como Boss Hoss), pero por supuesto contando con una parte ciclo digna de una verdadera moto. Así, a principios de los años 2000 apareció la Triumph Rocket III como un verdadero dinosaurio que lo aplastaba todo a su paso. A partir de ese momento, todo el resto de las motos eran pequeñas, ligeras y con poca fuerza.
Pero con la Euro4 llegó el final de los tiempos, puesto que entre otras preciosas motos míticas, las leyes anti emisiones abocaron a la Rocket III al final de su existencia. La 2.300 se tuvo que dejar de fabricar, pero estaba claro que Triumph no dejaría en el aire ese nicho del mercado que la misma marca había fabricado en exclusiva.
La TRIUMPH ROCKET III VUELVE en el 2019
El primer prototipo ya se pudo ver en la pasada conferencia anual de la marca en octubre, cuando una unidad apareció ya rodando en el escenario. Desde entonces, los rumores no cesan y, aunque todavía no hay confirmación oficial por parte de Triumph, parece que su idea es plantarle cara, aunque con otras armas, a la nueva Ducati Diavel que pudimos probar en su momento.
Así, el nuevo motor subirá de 2300 a 2500 cm³, con lo que marca un nuevo listón de gigantismo en el mundo de la moto. Por otro lado, la potencia subirá hasta los 182 CV con lo que en principio tendrá unos 21 CV más que la Ducati, aunque desde luego suponemos que con muchísimo más peso. También su cilindrada le permitirá tener más par, aproximadamente un 80% más.
Por otro lado, como es lógico a este aumento de potencia, fuerza y, suponemos, peso tendrá que venir asociado a un buen refuerzo de toda la parte ciclo. Con tija de triple anclaje y una horquilla (invertida también, como el modelo anterior) aún de mayor diámetro, incorporará pinzas Brembo M 50 con discos de 330 y nuevas llantas con basculante monobrazo. También el escape sigue las modernas líneas de compacidad, y en lugar del largo terminal de la 2.300, se comporta en un escape corto por el lado derecho que suponemos tendrá una gigantesca marmita colocada debajo del motor para pasar toda los homologaciones necesarias.
Las estriberas pueden ser regulables por varios motivos. El primero sería que la posición de conducción en una moto tan larga era difícil adaptar a las distintas medidas de cada piloto, y de esta forma la ergonomía sería más fácil de adaptar. Por otro lado, también ayudará a las modificaciones que necesiten las distintas versiones que sin duda tendrá esta Rocket, como tuvo la 2.300, que irán desde dragster hasta touring.
Por ley, deberá tener instalado ABS, pero además se presupone que tendrá unidad IMU para que éste sea regulable así como el control de tracción y los distintos modos de conducción, cuyo estado se reflejará en una pantalla TFT que Triumph diseña tan bien, como hemos podido ver en modelos como la Street Triple. Tampoco es desdeñable la idea que tenga cerradura remota como gran parte de la gama BMW o Harley.
Pues veremos a ver cómo evoluciona este modelo. Si apareciese en el mismo 2019, lo cual no es ninguna locura a pesar del silencio de la marca al respecto puesto que ya se ha visto rodando alguna unidad rodando, podríamos tenerla antes del verano.
¿Qué te parece una moto 2500 cm³?
