La concentración motorista Motauros 2018 ha demostrado que la estabilidad es fundamental para triunfar en el espíritu de los aficionados. Lleva 18 años sin parar,
Pues sí, frente a grandes concentraciones que han sufrido tormentas políticas y organizativas e incluso han estado un par de años sin poder convocarse (nos referimos a Pingüinos) o los que son tan nuevas que, a pesar de sus experiencias, aún no tienen ni tradición, divulgación ni años para asentarse (hablamos de La Leyenda Continua). Motauros ya lleva 18 años.
Bueno, parece que no son muchos pero si los suficientes para que la comunidad motorista la tenga ya como una reunión “fija”, y además tenemos en cuenta que casi 10 años antes de que Motauros empezase, la anterior organización de Pingüinos con Mariano Parellada y sus chicos ya organizaban allí Pingüinos, en el área de Valdegalindo de Tordesillas. Y con esto me refiero a que ya el entorno tiene décadas de “tradición”, tanto por una como por otra reunión, pero tradición motorista al fin.
Este año la organización daba por comienzo el día 18 hasta el 21 domingo, en que disfrutaron de un tiempo excepcional menos el mismo domingo que si se estropeó un poco, pero no pudo estropear toda la concentración. Por eso, la asistencia fue tan elevada, y no solo de inscritos, sino también de visitantes, tanto motoristas como aficionados. Muucha gente, sobre todo en la misma Tordesillas.
Sin duda, aparte de los numerosos conciertos, de lo mejor que se pudo disfrutar es de exhibición de “stunt riding” de Emilio Zamora, que el sábado por la mañana y se disfrutar a todos los asistentes de una espectacular exhibición en Zamora capital. Además, los premios fueron entregados por el mismísimo Jorge Martínez Aspar y por el hijo de ángel Nieto Gelete. Como sabrás, y con el resto de las concentraciones de estos dos fines de semana, todas están dedicadas a la memoria de ángel Nieto, por lo que su hijo y su compañero de fatigas vinieron a entregar todos los premios y a reforzar el homenaje.
CONCENTRACION MOTORISTA MOTAUROS 2018: LA SUERTE DEL CAMPEÓN
Como dice el título de este reportaje, las cifras mandan, y Motauros declara 16.212 inscritos. De esta forma, gana (si es que tener más inscritos se puede considerar así) con más inscritos «reales» que las demás, algo que se notaba ya simplemente dándote una vuelta por la zona de acampada, aunque desde luego no alcanza ni de lejos las grandes cantidades que se vivieron aquí en épocas anteriores en que había más de 20.000 inscritos.
No obstante, también hay bastantes críticas que hacer a la organización. De momento, personalmente, solicité mi acreditación el miércoles y recibo un mail diciéndome que todas las habitaciones están entregadas… Que no sé exactamente qué significa eso en una concentración de tamaño medio como esta. Eso de insinuar que se tiene pases de prensa limitados para un evento así es de risa, teniendo en cuenta además que estos últimos años me he acreditado allí directamente.
Pero incluso una vez allí, todo eran problemas. Que la persona encargada no estaba, pero que daba igual porque podía entrar sin problemas por la zona peatonal. Claro que si cualquiera puede entrar sin problemas, ¿para qué vale inscribirse? Efectivamente, no se puede entrar ni por la zona peatonal ni por ningún otro sitio a la concentración… menos a la zona de bares y chiringuitos, eso sí.
Otro detalle mejorable es permitir el acceso a todo tipo de coches, furgonetas, camionetas, etcétera. Básicamente, en la zona de acampada prácticamente ocupaban bastante más espacio todo tipo de vehículos de cuatro ruedas que las motos, y aquí metemos también a los quads que por cierto causaron bastante problemas y que el mismo director se encargado de remarcar que el año próximo serán mucho más controlados y no podrán ir en el desfile a lo largo del pueblo. Entre otras cosas, en el desfile este año un quad (haciendo el cafre, por cierto) se saliese llevó a tres personas por delante, entre los que está una niña de 10 años. Claro que viendo la dinámica el comportamiento sorprendentemente macarra que les dejan tener en toda la concentración, lo que me extraña es que no haya habido accidentes mucho más graves y con consecuencias más duras.
Bueno, pues incluso con la niebla y frío del domingo, se pudo disfrutar de una buena concentración, francamente numerosa y con un entorno envidiable que mucho ya conocemos desde hace décadas cuando que se celebraba Pingüinos. Sigue teniendo una zona de acampada envidiable, un pueblo bonito, con servicios, buenos hoteles y todo lo que puede necesitar una gran concentración, y esperemos que el año que viene la organización deje ver la experiencia que deberían haber recogido en sus 18 años de vida.
Por último, si quieres consultar los premios y las últimas noticias, puedes visitar directamente su web pinchando aquí, y para sus actividades, pinchando en nuestra noticia