Para los que tienen el carnet A2 calentito en el bolsillo como Kawasaki a remozado en pequeños detalles y la preciosa ninja 500 con más motor y complementos. Aquí tienes la prueba.
Equipo de pruebas: RST , LS2, Rainers
Todos hemos soñado con una Kawasaki Ninja en algún momento de nuestra vida, ya sea cuando éramos chavales más jóvenes o a lo largo de nuestra vida. Ahora mismo podemos encontrar Ninjas desde 125 hasta 1000 de más de 200 caballos, pero la estampa agresiva y afilada, casi como de nave de cómic de la Marvel, nos ha hipnotizado a todos alguna vez. Pues ahora , con la nueva ola de motos específicas para el A2 (es decir, con 35 kilovatios, lo que son 47 caballos, de potencia), podemos disfrutar de una estupenda 500 que proviene de las anteriores generaciones como fueron la 250, la 300, y más concretamente el anterior 400
¿Y en qué se ha modificado? pues básicamente en incrementar la cilindrada para conseguir mayores prestaciones y respuesta de motor, haciendo así frente a las restricciones que imponen las normas anti emisión , que están llevando a todas las marcas a una especie de guerra de anabolización continua de sus motores. O sea, cada vez más grandes y con mayor cilindrada. A este respecto, te recomiendo leer este reportaje al respecto de esta “carrera de anabolizantes” del mundo de la moto.
En este caso, la 400 tenía un diámetro de pistones de 70 mm, por una carrera de 51, y el cubicaje total era de 399 centímetros cúbicos. Bueno, pues ahora esa carrera se ha incrementado hasta los 58 milímetros y la cilindrada total es un 451 cc. Es decir, que estamos realmente ante una «cuatro y medio«. En cuanto a lo demás, se ha cambiado ligeramente la estética con su nuevo agresivo y realmente atractivo frontal, de formas casi alienígenas, y otros pequeños detalles como la conectividad de cualquier artilugio electrónico (normalmente tu smartphone) con el cuadro mediante Bluetooth, instalando previamente la aplicación que la propia Kawasaki tiene en los markets habituales de iPhone y Android. También tiene una versión simplificada (y muy útil) de llave wireless, pudiendo girar la cerradura con arranque, bloqueo, etc., girando un pequeño pomo

Chasis muy simple tubular, y un manillar ligeramente elevado respecto a la tija consiguen una posición cómoda y una amplitud de uso que no puede buscar en sus hermanas mayores más radicales como la espectacular ZX10. Además, es tremendamente ligera, algo que notas perfectamente cuando la mueves un parado, ya sea en tu garaje o para aparcarla donde sea. Declara 172 kilos y 756 mm de altura de asiento, por lo cual es asequible a cualquier tipo de público, algo fundamental para las ventas de este modelo que, realmente, seduce a cualquiera que la mire… ¡pero aún mucho más si tienes el carné recién sacado!

Parece mentira que una moto básica y de acceso pueda levantar tanta expectación cuando la aparcas en cualquier sitio, o entre las de tus amigos. A media distancia realmente parece una moto mucho más grande, con su picudo frontal y esos dos especie de colmillos inferiores bajo los faros. Estéticamente es demoledora para quien ame las formas deportivas y agresivas típicas de la marca, además del clásico color verde Kawa «Racing” que nos tienen encandilados a todos los amantes de las motos.
Solo cuenta con un disco delante, que ahora no es lobulado (una de las características que normalmente vemos en todas las Kawas deportivas) y cuenta con neumáticos de 110 mm de ancho delante y 150 detrás . La amortiguación solamente es regulable en precarga del amortiguador trasero.

PRUEBA KAWASAKI NINJA 500 SE. RODANDO.
Al estar desarrollada para el segmento de usuarios con el carnet recién conseguido, el A2, la moto ha de ser simple de manejo y de puesta a punto. Por ello, desde luego la moto no tiene absolutamente nada de ayudas electrónicas aparte del obligatorio ABS para ser homologada. Resulta tremendamente sencilla y fácil de manejar desde el primer instante, y el motor cobra vida con un palpitar muy digno de un buen bicilíndrico y con un tacto suave de cambio y de acelerador incluso en frío.

El tacto y progresividad de motor es absolutamente admirable en todo régimen, desde abajo hasta el corte de encendido a unas 12.000 revoluciones, y es aquí donde te das cuenta de por qué todas las marcas están presentando modelos específicos para proporcionar esos 46 o 47 caballos (45,4 en este caso) que se necesitan para poder ser conducidos con él carnet A2 en lugar de reducir artificialmente (o sea, básicamente electrónica) la potencia de motores con muchos más CV. Aquí tenemos este ejemplo, y también el de la nueva Aprilia 457.
Sin vacíos, sin ahogos y con una entrega de potencia plena y absolutamente dosificable, este motor es una verdadera delicia de usar en cualquier circunstancia, además de consumir realmente poco. Esto ya lo pudimos comprobar con la Kawasaki Eliminator 500, buena custom de acceso con toques de “muscle bike” que probamos la semana pasada y que comparte motor con esta Ninja.
En ciudad puedes rodar a regímenes bajos y medias teniendo siempre tracción y empuje incluso callejeando y moviéndote entre coches, mientras que en carretera, o en el ideal escenario de tu primer cursillo de conducción (aunque sería mejor decir pilotaje) en circuito, puedes estirar y cambiar por encima de las 9 o 10.000 revoluciones sin que el cambio se diga ni pío. Esto también se debe también a que la cilindrada unitaria es relativamente pequeña, aunque por supuesto aquí cuenta el buen ajuste que los chicos de Kawasaki han hecho de este motor y todo lo que le rodea.
¿Consumos? Entre unos 4,5 litros hasta 6,2 cuando aprietas mucho, mucho el ritmo, pero mantenerte entre 5 y 5,5 es fácil en carretera incluso a ritmos animados.

La frenada cumple solamente empieza a quedarse un poco corta cuando realmente ruedas rápido, tras muchas curvas (o sea, con muchas frenadas) y con calor, pero realmente el tacto es suficientemente eficaz y potente, pero nada agresivo y muy adecuado a las prestaciones y la parte ciclo de esta moto. A este respecto, por supuesto a todos nos hubiera gustado amortiguación de más calidad y regulación en horquilla e hidráulicos traseros (claro que en este caso sería bastante más cara…), porque solamente puedes endurecer el muelle de la amortiguación trasera, con la que no debes pasarte para no desequilibrarlo con el suave ajuste de la horquilla. No obstante, todo va bien porque el equilibrio entre comodidad y firmeza no es nada malo, y si te apetece viajar o hacer rutas con pasajero (o sea, con bastante peso detrás), entonces sí que endureces el muelle del amortiguador y todo irá ok. Por cierto, tiene un par de coquetos pequeños ganchos disimulados bajo el colín perfectos para enganchar equipaje con pulpos o cinchas.

PRUEBA KAWASAKI NINJA 500 SE 2024. CONCLUSIÓN.
Es simplemente maravillosa. Poco más tengo que decir, y realmente me da pena (como muchos compañeros periodistas con los que he intercambiado opinión) de no poder disfrutarla como cuando tenía 18 años. Me imagino que si, en el instituto, hubiera tenido la posibilidad de rodar con esta moto… no me puedo imaginar lo que hubiera supuesto para mí. Alegría infinita y una moto «de verdad» con la que me sentiría el mismísimo Jonathan Rea (antes de irse a Yamaha, por supuesto), una pequeña gran deportiva con la que, además, puedes irte de viaje, ir al cine y darte vueltas y excursiones con los amigos de fin de semana sin cansarte en absoluto y disfrutando cada metro gracias a su suavidad, ligereza y equilibrio general.

Desde luego, preferiría una amortiguación más completa, y algunas ayudas electrónicas no estarían mal, pero desde luego no las he echado de menos. El conjunto es tan equilibrado que, básicamente no he sentido su necesidad en ningún momento… al menos sol, buen tiempo y asfalto en perfecto estado.
Gran modelo con gran motor y una estética espectacular logran una moto que nos encandila a todos, tenga la edad o el carnet que tengas.
Por cierto, ¿tu que carnet tienes?

PRUEBA KAWASAKI NINJA 500 SE. LIKE-NO LIKE
LIKE: diseño. Motor. Ligereza y facilidad de uso.
NO LIKE: amortiguación muy básica y sin apenas regulación. Casi sin ayudas electrónicas.
FOTOS PRUEBA KAWASAKI NINJA 500 SE
















