Para ir a una concentración si ha nevado, para ir a un circuito, por avería… En caso de tener que transportar una moto, es necesario un remolque, pero, ¿que tipos de remolque hay?

Qué tipos de remolque hay, ¡y cuál nos conviene más, añadiría yo! Como bien sabes, un remolque de moto es un elemento que, prácticamente, ocupa lo mismo que un coche. Por lo tanto, no es lo mismo vivir en medio del campo con una parcela, que vivir en la Gran Vía de Madrid o Barcelona e intentar aparcar tu remolque en el garaje. Por lo tanto, comencemos, ¿qué tipo de remolque se adapta a tus necesidades?

REMOLQUES PARA MOTO: DETALLES QUE DEBES TENER INSTALADOS

Primero, debes fijarte en pequeños detalles que serán definitivos para la seguridad ya en carretera y mucho peso encima. Por ejemplo, que las llantas sean de 13 pulgadas. Las hay mucho más pequeñas, incluso de 10, y personalmente puedo decir que aparte de los problemas de estabilidad (a mí no me los dió porque el remolque en sí era ancho y muy sólido), pero sí de desgaste. Al tener menos diámetro, giran muchas más veces y su desgaste es infinitamente mayor. Por otro lado, lo que es la plataforma del remolque te recomiendo que no sea simplemente el chasis multi tubular, sino que lleve una plancha encima para que la superficie sea plana y así puedas pisar, mover y anclar las motos con seguridad.

Bueno, el siguiente comentario sobra, pero es evidente que primero has de tener (o conseguir, si alguien te lo presta) un coche con bola de remolque donde anclarlo. Siempre asegúrate que la bola está en buen estado y bien fijada, así como el anclaje de la cadena de seguridad (elemento obligatorio con cualquier remolque o instalación de bola en el coche, por si se soltase), y que la cazoleta, que es el elemento que ancla el propio remolque a esa bola, encaja y cierra bien. Un buen complemento es un bloqueador del tirador de la cazoleta, algo así como pequeños candados que evitan que ésta se abra.

Tampoco puedes olvidar la “rueda de jockey”, que es una barra telescópica con una rueda en la parte inferior que se ancla a la lanza del remolque. De este modo, cuando lo separes del coche, puedes desplegar la barra y, con la rodar el suelo, y desplazarlo rodando sin problemas incluso con las motos encima puesto que tendrás tres ruedas de apoyo: la de yo que y las dos del propio remolque. En cambio, cuando subas la moto necesitas soporte en la parte trasera para qué el remolque no bascule por el peso de la moto (y tuyo propio, que le estarás manejando), así que detrás te recomiendo que tengas instalados lo que se llaman “mozos de soporte”, unas barras con, generalmente, unos tiradores en la superior. Están unidos al remolque con un soporte regulable, y los puedes subir y bajar, De modo que, si los apoyas en el suelo, el remolque queda bien fijo.

sdr

Otro elemento de seguridad fundamental: los frenos. Los remolques de cierto nivel llevan incorporados dos tipos de freno. Uno es el freno de inercia, con una barra telescópica incorporada dentro de la lanza y que, cuando frenas el coche, se comprime por la fuerza de la inercia (de ahí el nombre) y activa los frenos. Esto va unido a un freno estático, una palanca con un trinquete que bloquea los frenos para cuando tienes que tenerlo parado, o subir las motos teniéndolo desanclado del coche.

REMOLQUES PARA MOTO: DOS TIPOS

Básicamente, hay dos tipos de remolques: el cubierto y el descubierto.

REMOLQUE DESCUBIERTO: es el más clásico, que suele tener gran parte de los aficionados por unos buenos motivos. De momento, es más fácil de mover ya sea en parado cuando lo vayas a aparcar, o transportándolo porque en principio no necesitas un coche demasiado potente. Por otro lado, es más barato de compra que el cubierto porque necesita menos material y menos chasis para su fabricación.Otro detalle es que se pueden elevar por un lateral y pegar la pared- aunque esto no suele ser una maniobra fácil- y te hace ganar mucho espacio sobre todo en garajes.

En cuanto a sus desventajas, está que no puedes dejar la moto fijada sobre el al aire libre por la noche, por ejemplo, porque cualquier desaprensivo que pase cerca te puede robar alguna pieza o, directamente, la moto. Además, aquí también la moto es víctima de los agentes atmosféricos. Un Madrid- Jerez bajo la lluvia o nieve, por ejemplo, la afecta prácticamente igual que si estuviera rodando. En definitiva, la moto está mucho menos protegida

REMOLQUE CUBIERTO (O CERRADO): son los remolques que llevan una carrocería fijada a la base de uno convencional, y así puedes meter motos o lo que necesites dentro. Su principal ventaja es que la moto va mucho más protegida y, dependiendo donde vayas puedes trasportar también muchos más elementos dentro junto a las motos, algo importantísimo cuando por ejemplo te acerques al circuito y tienes que llevar caballetes, cajas de herramientas, varias equipaciones, etcétera. Además, con una buena cerradura, puedes dejarlo en la calle reduciendo mucho el peligro de que te roben algo (aunque pueden reventar la cerradura y abrirlo, al igual que un coche convencional). Por último, muchos remolques cerrados tienen la puerta trasera de acceso abatible, por lo que también hace de rampa y te hace mucho más fácil poder subir la moto.

Entre sus desventajas está que necesitas mucho espacio para aparcarlo, algo tremendamente complicado si vives en medio de una ciudad. También su precio de compra es mucho más elevado que el descubierto, especialmente si la carrocería es de fibra de vidrio con formas aerodinámicas. Eso también es importante porque un remolque cerrado convencional de chapa, con forma de caja, hace mucha resistencia al viento y, con rachas fuertes, puede llegar a ser muy inestable, además de incrementar mucho el consumo del coche de arrastre. Otro detalle es que este coche de arrastre tiene que tener bastante potencia y par (no es buena idea un motor potente a base de muchas revoluciones con baja cilindrada), puesto que este tipo de remolque pesa más y tiene más volumen que uno descubierto.

Si tienes en mente comprarte uno, ya tienes ideas para darle vueltas a la cabeza. En el próximo artículo analizaremos cuál es la mejor forma y los mejores “inventos” para poder subir tu querida moto al remolque con la mayor seguridad.