Lo que parecía increíble ha sucedido. Ni Márquez, ni Dovicioso, ni Rossi, el que ha ganado es un piloto que siempre estaba ahí pero no parecía capaz de ganar en Austin.

En los entrenamientos ya habían ocurrido cosas, digamos, curiosas. Por ejemplo, la grandiosa Honda RCV de Jorge Lorenzo había perdido la cadena, por lo que Jorge tuvo que abandonar su manga y esto le hundió en la parrilla de salida. Esto no era la primera vez que ocurría a una Honda del Honda Repsol, lo que es chocante en un equipo considerado el más grande del Mundial de MotoGP.

Pero eso no es todo, porque en carrera los dos pilotos Repsol han tenido que abandonar por diferentes motivos. En el caso de Marc, cuando rodaba con casi 3 segundos de ventaja, perdió el agarre de la rueda delantera y fue arrastrando varios metros con la moto por un lado y Marca agarrado al manillar para intentar una imposible recuperación del control. ¡Y menos mal que no se ha hecho daño de consideración!

Con el favorito fuera de la batalla, Valentino (que siempre está luchando por la cabeza) disputó la victoria, pero un inspiradísimo Rins y su homogénea Suzuki parecieron tener una magia especial hoy, y así el español pasó al Dottore. Tuvo que soportar su acoso sin tregua, pero al final Alex logró una victoria en un circuito difícil y rápido como el de Austin.

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Así, tras este giro espectacular de los acontecimientos, queda como líder Dovicioso con 54 puntos, Valentino Rossi detrás con 51, Rins asciende a tercero con 49 mientras que Marc Márquez baja a la cuarta posición con 45. Es decir, que los 4 primeros están en tan sólo 9 puntos.

La próxima carrera será en España, en el mítico circuito de Jerez, el 5 de mayo.