Estrecha, compacta, muy manejable, ligera (unos 140 kg) y con un buen ángulo de giro, la KTM Duke 125 es ágil y fácil de conducir. Perfecta para los que se inician en el mundo de la moto ya que la podrás llevar con el A1.

Aunque esta nueva versión es un pelín más alta que el modelo anterior (830 frente a 800 mm), la posición de conducción conserva su carácter supermotard y se hace más confortable para los pilotos más altos sin penalizar demasiado a los más pequeños que podemos contar con un asiento relativamente estrecho y con la elasticidad de las suspensiones que se hunden suavemente en cuanto te sientas. Sin problemas para llegar al suelo.

Prueba KTM 125 DUKE 2017: sorteando atascos con estilo

Una vez en marcha es confortable tanto en vías rápidas – no molesta demasiado la falta de protección delantera ya que las velocidades nunca llegan a ser estratosféricas (tus puntos están a salvo…) – como en ciudad. En ambas situaciones conserva una buena estabilidad en todo momento. En esto tienen algo que ver los neumáticos de serie (Metzeler Sportec M5) que garantizan muy buen agarre tanto en seco como en mojado.

Fotos prueba KTM Duke 125 (39 imágenes)

 

Sin embargo su territorio indiscutible son las carreteras con curvas: entra con asombrosa facilidad en las curvas y es extremadamente ágil y ligera en los cambios de dirección. ¡Es divertidísima de conducir! Sobre todo si le buscas el lado positivo a su motor monocilíndrico 4T limitado a los 15 caballos que permite el A1: como por debajo de las 5.000 rpm es algo perezoso, tendrás que mantenerla entre las 8.000 y la zona roja (donde se sitúa su mejor comportamiento en cuanto a buenas aceleraciones y reprise). El tener que jugar constantemente con el cambio para evitar que caiga de vueltas… ¡te garantiza horas de entretenimiento y motivación!! Desde luego, los retoques que han tenido que hacer en su interior para pasar la Euro4 se notan en su respuesta.

En cuanto al sistema de frenado, es de los más nobles: incluso en caso de frenada brusca la moto permanece recta. Lleva disco de 300 mm de diámetro, pinza de anclaje radial y 4 pistones «ByBre» (filial india de Brembo).

También lleva de serie un excelente ABS que, aun no siendo nada intrusivo, algunos desearan desconectar para disfrutar de algún derrapaje. Esto se hace fácilmente desde la instrumentación e incluso se puede optar por desactivar solo el ABS trasero.

Prueba KTM 125 DUKE 2017: Nuevo look

Estéticamente, rebosa deportividad con unas líneas muy afiladas y unos colores más dinámicos. Vista de lejos, no sabes si es ella o su hermana mayor… ¡Me encantó!

El depósito de gasolina, más plano y anguloso, es de acero y tiene una capacidad de 13,4 litros. Con un consumo medio de aproximadamente 3 litros/100km, no hay dificultad en alcanzar una autonomía de unos ¡400 km! Bueno, una naked no es la mejor elección para ser un gran rutero, pero con esta autonomía…

KTM Duke 125 2017 MotorADN (36)

El moderno y potente faro delantero con tecnología LED (con luces diurnas también de leds) así como el trasero, le dan un toque sofisticado. Se agradece el detalle de las piñas retroiluminadas que facilitan mucho la manipulación de noche o en túneles.

Se echan de menos unas asas para el pasajero así como un poco más de espacio bajo el asiento trasero en el que poder meter un buen antirrobo de disco (la multitud de cables ahí dentro tampoco ayuda mucho…). Una llave codificada hubiera sido un plus, como en sus hermanas mayores.

La instrumentación con la espectacular pantalla (y más para una moto de esta cilindrada) TFT en color de 5,2 pulgadas proporciona toda la información principal de un simple vistazo: velocidad, régimen del motor, marcha engranada, nivel de gasolina y temperatura del motor. ¡Muy conseguido el cambio de color del cuenta vueltas que pasa al rojo según van aumentando las revoluciones! El resto de la información (velocidad media, consumo medio, autonomía, cuentakilómetros parciales…) aparece en el menú de la parte izquierda de la pantalla y se puede personalizar mediante las teclas de función situadas en la piña izquierda (arriba, abajo, validar, salir). Para los más despistados, la instrumentación también nos indica si está puesta o no la pata lateral.

KTM Duke 125 2017 MotorADN (13)

La pantalla se ve perfectamente en todo momento, incluso a pleno sol, y pasa automáticamente de modo diurno (iluminación clara) a modo nocturno (muy útil cuando pasas de un sol cegador a un túnel bien oscurito…).

La Duke incluye también un kit de conexión Bluetooth que te permite controlar tu smartphone desde la moto sin quitar tus manos del manillar. Gracias a la aplicación «KTM My Ride» que te puedes descargar “por la cara”, podrás contestar llamadas, reproducir música pero, eso sí, con toda seguridad: no podrás seleccionar un álbum o pista concretos ni pretendas ver un clip o seleccionar un contacto o enviar WhatApps. ¡Recuerda que ante todo estás ahí encima para conducir!

Me lo pasé genial con esta pequeña maravilla y ya la echo mucho de menos…

Prueba KTM 125 DUKE 2017: LIKE-NO LIKE    LIKE-NO LIKE

LIKE: Diseño. Parte ciclo. Frenos.

NO LIKE: Que haya tenido que pasar la Euro4. Capacidad de carga. Penetración aerodinámica.

Prueba KTM 125 DUKE 2017: Ficha técnica

Fotos prueba KTM Duke 125 (39 imágenes)