Tras la llegada de la moto más esperada de esta temporada, he probado la BMW R1300GS. La “reina trail” demuestra hasta que punto BMW es capaz de pulir su diamante, cada vez más brillante.
Allá por finales de septiembre- periodistas especializados en su mayoría- tuvimos la oportunidad de rodar todas las unidades de prensa de la inminente presentación de la nueva arma de BMW, desarrollada para mantener su control del segmento gran trail con la moto reina absoluta (con mano de hierro) del mercado desde hace décadas. Como sabrás, esta es indiscutiblemente la gran GS que, hasta ese momento, era la BMW R1250GS pero, como todos dedujimos tras la primera jornada de esos rodajes, las excelencias del nuevo modelo no le permitirían mantener esa posición mucho tiempo. Efectivamente, ese nuevo modelo era la BMW R1300GS plagada de mejoras y nuevas características que mejoraban a la 1250.
Bueno, pues esos rodajes de las primeras unidades nos acumularon cerca de 3.000 kms, y en todo tipo de condiciones. De hecho, la última jornada fueron algunos de los 700 kms. más duros que te puedas imaginar, con lluvia en cada segundo (torrencial la mitad del tiempo) y cada metro recorrido aquel día. Si fuera poco, a la vuelta de unos 10 km de donde terminábamos, un tráiler lleno de coches se había salido en una curva de la carretera de La Coruña bajo el puente de Torrelodones y había un bloqueo de casi 10 km. De hecho, los que allí estuvimos, cuando nos vemos en eventos y presentaciones, nos saludamos diciéndonos “¿te has recuperado ya del rodaje de la BMW R 1300GS?”
Bueno, batallitas aparte, lo cierto es que, en condiciones nefastas, la nueva BMW 1300 ya me había demostrado que funciona como un reloj, pero faltaba la prueba real del día a día: moverte por ciudad, largas rutas de fin de semana (con buen tiempo y algo de sol, si fuera posible…), viajes y todo lo demás. Es una moto trufada de tecnología con lo último de lo último que BMW ha sido capaz de desarrollar (que, como es sabido, es de lo mejor que puedas encontrar en el mundo de la moto) y que lucha por situar a BMW Motorrad, como hacen el resto nombres europeas, en una posición premium y tecnológicamente muy superior a la horda de motos chinas (muchas excelentes, por otro lado) que llegan a nuestro mercado en todo lo referente a esta tecnología y todo tipo de gadgets. Todos los datos puedes verlos en su ficha técnica que tienes aquí.
Bueno, pues entre un motor totalmente nuevo, ayudas electrónicas y muchos más cambios, vamos a ver todas las modificaciones que podamos ver en esta nueva BMW R1300GS, Veamos.
PRUEBA BMW R1300GS Triple Black: como es por dentro.
Empecemos por el motor, que ha subido a los 1300 cm³ reales desde los 1.254 reales, lo que supone un incremento de potencia y par de 134 a 143,5 CV. Además, todo el interior también ha cambiado lo que consigue que, pese al incremento de cilindrada, las vibraciones sean claramente menores… Aunque presentes porque recuerda que estamos ante un motor bóxer con cilindros a 180°. El incremento de potencia se explica, aparte del aumento de cilindrada, en detalles como una mayor compresión que pasa del anterior 12,5:1 a 13,3:1, además de una nueva distribución y válvulas bastante más grandes. Por ejemplo, las de admisión pasan de 40 y 44 mm y las de escape de 34 a 35,6.
El chasis también tiene una modificación más importante, y que se ha convertido en uno de los elementos que los aficionados más se fijan cuando ven rodando una nueva 1300 GS. Se trata chasis de acero que ahora tiene un subchasis que antes era tubular y ahora es de chapa de aluminio fundido a presión.
No obstante, todos estos datos y detalles los tienes en este reportaje que editamos en su momento. No te pierdas consultarlo, porque resulta especialmente interesante
Así, tiene el Control de Crucero Dinámico ACC, que controla el distanciamiento con otros vehículos en marcha y reduce la velocidad si los radares, delantero y trasero, que equipa este modelo. Puedes regular la distancia con que el sistema entre en acción con el completo software mediante un menú efectivo, pero muy completo y lleno de submenús que-ya te aviso- debes aprenderte bien antes de montar. Si no, tendrás sensación de que la 1300, de vez en cuando, empieza a reducir la velocidad y a frenar sin que sepas la razón. Para ello, debes comprobarlo cada vez que arranques por la mañana, porque se activa automáticamente. Es decir, si prefieres que no es entre la acción, debes desactivarlo.
Otro de sus grandes avances es la incorporación de control variable de la altura por sistema hidráulico. Es regulable en modo manual y automático, y puedes elevarlo a 850 mm (con el asiento de serie, que puede ser más alto como opción de catálogo) para rodar y reducirlo a 820 cuando paras. Importante señalar que en modo automático se eleva cuando superas los 50 km/h y se baja cuando bajas de los 30, y en modo manual es divertido hacerlo en parado (debes tener el motor arrancado) y ver como la moto sube y baja en modo manual. En cuanto a esto, el acceso a cualquier tipo de usuario también se mejora con un ahorro del peso de ni más ni menos que 12 kilos, que se queda en 237. De ahí a 250…
En cuanto a la gama, parte del modelo básico, existen tres variantes que son GS Trophy, Opción 719 Tramuntana y la completísima Triple Black que protagoniza nuestra prueba. Incorpora de serie el asiento y las estriberas Comfort, caballete central, parabrisas elevado y regulable electrónicamente, además de los cubre puños deflectores de viento y una buena parrilla trasera. Por otro lado, nuestra unidad concretamente si que incorporaba maletas y Top Case con un nuevo sistema de ancho regulable por pomo, que es más incómodo que el anterior sistema de palanca pero fantástico a la hora de elegir exactamente el ancho que necesitas, cuando antes solamente podías tener el modo estrecho o ancho, pero nada entre medias. Un muy buen avance.
Bueno, como ya te dicho, todos estos detalles puedes verlos en el reportaje que te inserto más arriba y también en este otro,
PRUEBA BMW R1300GS Triple Black: probando (muy) a fondo
Bueno, y ahora pasemos a lo que realmente nos interesa: saber cómo va, como rueda y cómo se siente la nueva BMW R1300GS.
A mí desde luego estéticamente me gusta que ninguno de los modelos anteriores. Opino que ese nuevo faro simétrico en forma de cruz le confiere personalidad, buena línea, y además ilumina bien por la noche. También todo el frontal me parece menos aparatoso, más en línea con la sensación de estar cargando más en el tren delantero … más deportiva. Después puedo decir que lo que más me sorprendió desde el primer instante, ya cuando rodamos aquellas primeras unidades en septiembre, fue las pocas vibraciones que transmite cuando arrancas el motor en frio. Tanto es así que la primera vez pensé que no había arrancado, aunque debo que citar que había bastante ruido ambiente. Sin embargo, miré el tacómetro y estaba a mil revoluciones.
Esto es especialmente admirable teniendo en cuenta que un motor bóxer tiene que vibrar por concepto, más en parado y en frio, y más teniendo en cuenta el aumento de cilindrada unitaria. El embrague y cambio (también el sistema semiautomático bidireccional) son totalmente nuevos, y al meter primera, notas el excelente buen trabajo que han hecho los ingenieros de la marca en cuanto a todo el bloque motor. Cuenta con cuatro modos de conducción con sus curvas de motor que son Road, Rain, ECO (que empuja con infinita mayor suavidad y reduce los consumos al mínimo) más el nuevo modo de serie, y especial para adentrarnos en campo, Enduro. Por si estas cuatro opciones no fueran suficientes, puedes incorporar opcionalmente modos son más completos como “Dynamic», «Dynamic Pro» y «Enduro Pro”.
Una vez en marcha, sobre todo teniendo en cuenta el motor y cilindrada que estoy probando, también sorprende la suavidad del cambio tanto manual en ciudad o zonas lentas como el semiautomático bidireccional en un propulsor de pistones opuestos como este. Aquí hay que citar que se ha re posicionado la caja de cambios, situándose ahora en el centro en la parte inferior del motor, de forma que las inercias se notan mucho menos al estar situado en una posición mucho más baja, además de contar con la tecnología BMW ShiftCam que se encarga de gestionar la distribución (el alzamiento de las válvulas) según el régimen de motor, todo en tiempo real.
No es nuevo en BMW, pero desde luego se nota mucho más afinado que antes. Desde luego, no llega a los niveles de suavidad de un buen V4 ó 4 en línea, pero es que no va a hacerlo nunca porque no es ese el objetivo de los “fans” de las GS, pero desde luego os aseguro que puedes llegar a una curva o a un salto, bajar dos y tres marchas de golpe y tanto el cambio como el motor lo absorben sin problemas. Eso sí, a lo largo de la prueba (muchos kilómetros) tuve un par de fallos de marchas que no «bajaban», pero desde luego eso es una anécdota comparado con un comportamiento general único.
En cuanto a ergonomía, lo cierto es que es, sin duda, esta GS grande 1300 es sobre la que más cómodo me he sentido desde el primer instante. Nuestra unidad, como ya he comentado, contaba con la altura variable, y eso de sentir un modelo totalmente accesible para una altura que no tengas que medir más de 1,8, pero que en cambio en marcha sí que tengan la agilidad y la distancia libre al suelo de una moto grande y alta, es una verdadera maravilla. Al principio me costó acostumbrarme al sistema «sube y baja», pero a partir del primer día ya apenas lo notaba, y todos son ventajas. Lo cierto es que no es la primera moto que tiene este gadget tan útil como porque Ducati y Triumph ya lo habían incluido en alguno de sus modelos, pero lo que nos interesa es si funciona bien en esta BMW GS1300, ¡y lo hace!
Con 145 caballos y menos peso que la anterior (algo que se nota tanto en marcha como a baja velocidad y moviéndole en parado) lo cierto es que acelera mucho, bien, con mucha tracción y total contundencia. Claro que esto era algo que esperar en un gigantesco bicilíndrico de 1300 con un par declarado de 149 Nm a 6.500 rpm. Así, a salir de la curva poder roscar el acelerador que te catapulta hacia la siguiente curva, frenar con la agresividad que prefieras (ahí entran la multitud de ayudas electrónicas) y entrar en la siguiente como si fueras sobre un rail. Además, también tiene control de freno motor, lo que permite que no haya las brusquedades habituales en motores con pistones tan grandes, ¡lo que es fantástico! Eso sí, y como no has de olvidar, que es una moto alta y que mide lo que una trail asfáltica, no lo de una naked deportiva compacta. Por eso, al salir acelerando de la curva tiende a subvirar. Tienes las sensaciones casi de una naked deportiva, pero en esa circunstancia que necesitas tanta agilidad y direccionabilidad, notas que, sobre todo, es más larga. Claro que eso se compensa con una ergonomía para mí prácticamente ideal, con cómodos asientos y buena capacidad de carga. Por ejemplo, nuestra Triple Black equipaba estas maletas de anchura variable por un nuevo sistema de un pomo, lo que permite elegir el ancho que tú quieras y no él «todo o nada” del anterior y más simple sistema de palanca.
çPor cierto, un buen detalle que ha sido muy valorado por los aficionados (según me han ido comentando a lo largo de la prueba) es el nuevo sistema de ayuda para poder elevar la moto sobre el caballete, por medio de una pequeña palanca plegable en la pata izquierda. Para valorar las ventajas de este pequeño gran invento, hay que haber intentado subir una GS con los llenos, las maletas y el top case lleno.
Por otro lado, para cualquier tipo de conducción hay que celebrar que cuenta con la nueva suspensión electrónica Dynamic Suspension Adjustment (DSA), que ajusta automáticamente no solamente el hidráulico, como antes, sino también la dureza del muelle. De ese modo, mayor aceleración o frenada, o mayor peso en el tren trasero, se regula de una forma prácticamente automática y para mantener la estabilidad
En uso “off road” esa motricidad, con el modo de pilotaje Enduro, notas como la rueda trasera empuja como un Panzer, y recuerda que tiene 20 mm más de altura en cada tren. También el poco peso y la buena ergonomía (puedes incorporar como complemento un manillar 30 mm más alto) logra más control, y eficacia, además de los cambios en la amortiguación más larga para absorber mejor los baches. No obstante, estamos hablando de casi 300 kilos o más en marcha con piloto de una moto que es una gran trail, pero no una enduro
En cuanto a los consumos, BMW sigue dando ejemplo de una tecnología electrónica admirable porque prácticamente en ningún momento pasé de los 6, 1 litros con alguna punta de 6,5, pero en carretera es realmente difícil pasar de eso como no lleves muchísimo peso (o pilotaje muy deportivo) y ruedas en autopista a velocidades altísimas. Además, la penetración aerodinámica de nuestra unidad con la altura de la pantalla regulable, los paramanos y las entalladuras laterales del depósito que te permite esconder bien las piernas, la verdad es que era mucho mejor de la que te esperas. Además, durante las jornadas de esta prueba sí que sufrí verdaderas rachas peligrosas de viento, y la BMW demostró que soporta muy bien los envites laterales, y eso que esta unidad equipa llantas de aleación aunque, eso sí, muy ligeras y con brazos muy finos. Ten por seguro que con las unidades con llantas de radios, es aún mejor
PRUEBA BMW R1300GS Triple Black: conclusión.
Sin duda estamos ante la mejor GS de la historia, aunque reconozcamos que esto es el argumento “más vulgar”, porque eso decimos los periodistas siempre que BMW presenta una GS nueva… pero en este caso es más verdad que nunca. La R1300GS es claramente (lo notas al instante de poder rodar sobre ella) más ligera y más potente, más manejable y con un tacto más sport en todo el tren delantero. Eso sin hablar de gadgets como la altura regulable automáticamente, el distanciamiento por radar, el motor más suave y dosificable, inventos como la nueva regulación de anchura en maletas y top case… es mejor moto en todo. E increíblemente más estable y divertida como moto de calle y carretera, así como más cómoda y confortable como moto de turismo con sus moderaos consumos y 19 litros de depósito. En esto, me parece lo mejor de los mejor que puedes disfrutar actualmente.
BMW ha hecho un gran trabajo. Si tienes el dinero suficiente (o te puedes meter en el sistema Select, un gran invento si buscas una BMW) no dudes ni un momento que es una moto casi perfecta.
PRUEBA BMW R1300GS Triple Black: LIKE-NO LIKE
LIKE: Nuevo diseño. Motor y tecnología. Control adaptativo de altura.
NO LIKE: Tanta tecnología que ajustar que resulta abrumadora. Debes regular o anular el Control de Crucero Activo (ACC) al iniciar la marcha.
FOTOS BMW R1300GS Triple Black PRUEBA