Una revolucionaria versión de la BMW R1200GS hibrida con tracción a las dos ruedas había invadido las publicaciones especializadas de todo el mundo… ¡pero todo ha sido una gran broma!
Pues sí, en las redes sociales se había extendido como la pólvora la noticia de que BMW había presentado una revolucionaria evolución de su superventas R1200GS con novedades alucinantes. Básicamente, serio modelo que tecnológicamente dejaría atrás a toda la competencia y marcaría un nuevo listón para desarrollar las motos… Pero todo era una broma causada por el 1 de abril, el equivalente a nuestro Día de los Inocentes en el mundo anglosajón.
Mega trail eléctrica, una broma inocente muy interesante
BMW R 1200 GS Hybrid All-Wheel Drive. Así se llamaba el invento. Es decir, traduciendo literalmente del román paladino, Híbrido y Tracción Integral.
Desde luego, era una broma, pero había que saber bastante de motos y tecnología para discernir la realidad de la fantasía. Lo primero es que declaraba que esta R 1200 GS equipaba, aparte de su tradicional motor bóxer de 125 CV, un motor eléctrico lo que le haría ser básicamente una moto híbrida. Este motor eléctrico proporcionaría por su lado 45 CV, lo que daría un total de 170. Además, en el tren delantero se había eliminado un disco para colocar, entre otras cosas, la toma que recargaba la energía aprovechando la frenada.
Como verás, todo esto tiene visos de realidad. De hecho, las motos híbridas ya existen puesto que marcas como Piaggio ya tiene hace años modelos térmico-eléctricos con sus scooters MP3 de tres ruedas. A su vez, la propia BMW tiene los que son los mejores y más tecnológicos scooters eléctricos del mercado. Por supuesto, estamos hablando del C Evolution que se acerca a las formas de los megascooters de la marca, C650 Sport y 700 GT. Tiene con un completo software para cambiar de modos y controlar la recuperación de energía de los frenos… algo que precisamente también se imitaba en las fotos de esta gran broma con una pantalla central en el cuadro de mandos. Además, el Evolution tiene un complejo conjunto de baterías recargables de última tecnología compartidas con su ya famosa línea de coches BMW I tan sólidas que, básicamente, hacen de chasis.
En fin, que tecnológicamente parecía posible pero, para que te hagas una idea, los escúteres necesitan 3 unidades de batería por siete del coche, y por ello el peso del C Evolution ronda los 280 kilos. Si lo piensas, instalar aunque sea una sola unidad de estas baterías en la R 1200 GS, manteniendo su estructura es una moto actual, sería muy complicado por no decir imposible. Claro que, tal como evoluciona la tecnología en las baterías de recarga, proponer que era un prototipo no parecía demencial… ¿o sí?
Tracción total a las dos ruedas
Después está el tema de la tracción integral a las dos ruedas. Para ello, como hemos dicho, se había eliminado uno de los discos delanteros para poder trabajar también el sistema de tracción. Por supuesto, tampoco es la primera moto que lo propone y que lo consigue, pero técnicamente desde luego no se ha llegado a un punto de funcionamiento que pueda ser usado sin problemas.
No tenemos más que recordar las míticas Suzuki Nuda y la Falcorustyco que, a mediados de los 80, propusieron motos dignas de un manga que también presentaban tracción delantera por sistema viscoso, o también como prototipos las más recientes Dodge Tomahawk o la Kickboxer Diesel con motor Subaru.
Desde luego, además conseguir que ambas ruedas traccionen hacia delante es una de las grandes aspiraciones del mundo “off road”. En este caso, se supone que el sistema podía entrar en acción bien automáticamente o manualmente presionando un botón señalizado como 2W colocado en la piña izquierda de la BMW R 1200 GS.
Todo se complicaba demasiado. Además, se decía que lo habían probado a temperaturas de hasta 55° bajo cero y con 1 m de nieve, algo que también cuesta creer. No obstante, lo que desde lo ocurrido es que los chicos de BMW motos (o, técnicamente, BMW Motorrad) se han apuntado un tanto en cuanto expectación mediática y en llamar la atención de los medios.
Y quizá de hacernos creer algo que quizá no esté tan lejos…