La pareja de motoviajeros compuesta por Vicente y Fernanda-youtubers e instagramers- sufrieron ataques con violación en India. ¿Qué pasará ahora?
Vicente Barberá, valenciano de 63 años, y Fernanda Francisca dos Santos, española de origen brasileño nacida en Goiânia, cerca de la capital Brasilia de 28, sufrieron hace ya cuatro días un ataque mientras descansaban de su viaje. Se conocieron en el 2015 y, poco más tarde, decidieron recorrer el mundo-en este caso, concretamente Asia- con su par de motos. Concretamente, una Honda Africa Twin CRF 1000 él y una Honda CB500X ella.
Desde hace cinco años lo retransmiten en su canal @vueltaalmundoenmoto . Vicente declara que:
«Acabamos el tour europeo recorriendo Turquía, Georgia y Armenia. Luego, nos metimos en Oriente Medio. Siempre vamos con la moto, recorriendo los rincones más remotos y salvajes, durmiendo con la tienda de campaña donde podemos. Nos ha pasado de todo, tanto bueno como malo, pero nunca nada tan grave como lo de India»
Por ejemplo, en este momento ya habían recorrido Pakistán, Bangladesh, Sri Lanka, la India y Nepal. Mientras descansaban en la ciudad india de Dumka, por la noche fueron atacados por un grupo de agresores y violadores que, según se ha sabido más tarde, tenían entre 20 y 30 años. A él le propinaron una gran paliza donde a él le amenazaron con un cuchillo y le partieron la boca y parte de los dientes y, mientras le tenían bloqueado, los siete atacantes la violaron alternativamente. De hecho, Vicente pensaba que, en ese momento, ya la habían matado porque la apartaron para violarla, pero se alivió al verla aparecer tras recibir la paliza de los delincuentes.
No obstante, su primer gran problema ha llegado aquí, en India, donde los niveles de delincuencia son altísimos y más contra extranjeros. Y aún más contra mujeres. Dumka tiene infraestructura básica, pero está en situación de pobreza y bajo nivel de desarrollo, además de contar con pocas carreteras en mal estado. No obstante, lógicamente en este tipo de viajes los sitios especialmente exóticos lejanos tienen un atractivo especial, y más si retransmites tus experiencias y las compartes en redes de sitios con una naturaleza tan exuberante como tiene esta zona. No obstante, India tiene, en general, un altísimo nivel de ataques y violaciones a mujeres. En este caso, la ciudad cuenta con dos conocidos grupos de delincuencia organizada de insurgencia maoísta que sostienen habituales luchas y peleas con la policía. Así, mientras dormían en su tienda de campaña, ocurrió el ataque, la paliza a él y las violaciones a ella.
Tras terminar el ataque, y al contar con todo tipo de cámaras y herramientas para retransmitir en redes, grabaron el video por lo que todo el mundo fue informado de este brutal ataque, que más tarde fue retirado para no entorpecer la investigación policial, y se empezaron a tomar las medidas para atrapar a los criminales. En este video, Vicente decía indignado:
La policía les llevó a 60 km de distancia, un hospital para hacer las pruebas de ADN y demás medidas médicas. Comenzaron a dar caza a los atacantes, que rápidamente fueron identificados. En poco tiempo fueron detenidos cuatro de los atacantes, en el momento de escribir estas líneas aún queda por encontrar al más violento. Tras pasar la noche en el hospital, el hombre declaró:
“Nos acaba de pasar algo que no le deseamos a nadie. Nos han asaltado en la tienda [de campaña], nos han golpeado; me han puesto un cuchillo en el cuello y me han dicho que me van a matar; y a Fernanda la violaron siete tíos. ¡Hijos de puta! Estamos con la policía, hemos ido al hospital y dormimos aquí”
“Me duele todo el cuerpo de las patadas que me han dado. Menos mal que me puse el traje porque me imaginaba qué iba a pasar. Me puse el traje, y empecé a recibir hostias… paré las que pude con el brazo, con el casco… Me tiraban piedras… Intentaron echarme al suelo, peor no podían»
Cuando habla de traje se refiere al mono de Cordura para la moto, que le ayudó a no sufrir más heridas y a amortiguar relativamente los golpes que recibió.
«A dos de ellos los identificamos enseguida porque los tenemos grabados. Cuando llegamos a la zona donde acampamos, de los campos empezaron a salir aldeanos que tenían curiosidad y querían saber qué hacíamos por allí, porque no es una zona nada turística. Nosotros estamos acostumbrados a esa atención en los lugares más rurales que visitamos. Para el contenido que subimos cada día a redes, grabamos varios vídeos al llegar a Dumka. En dos de ellos sale de cerca uno de los chicos que luego nos atacó. En otro vídeo también hemos identificado por la ropa a otro de los violadores».
Por su parte, Fernanda declaró tras el ataque que:
«Los hombres me arrastraron gritando ‘solo sex’. Me violaron, iban turnando mientras unos vigilaban y así se quedaron alrededor 2 horas. Teníamos muy poco, su verdadero motivo era violarme»
Aparte de las violaciones en sí, Fernanda sufrió una fracturada en una costilla y morados en los pechos, las piernas y las zonas íntimas.
En cuanto a las reacciones dentro del país, el apoyo hacia ellos ha sido incondicional. De hecho, uno de los mayores moto club del país, Superbikes, emitió el siguiente comunicado:
«Nuestros corazones están con Fernanda, que ha sufrido un horrible acto de violencia en Markanda (Jharkhand). La gran mayoría de la gente en la India es acogedora y de buen corazón, y es devastador ver la imagen de este hermoso país empañada por acciones tan atroces. Esperamos que se haga justicia rápidamente con los perpetradores».
La asamblea legislativa de Jharkhand llegó a suspender en, por lo menos, dos ocasiones la sesión del lunes en que los distintos grupos se acusaban mutuamente (entre líderes y opositores) por culpa de estos ataques. Se pidió un debate concreto sobre este caso y sobre la seguridad de la zona.
Este martes se ha detenido otras cinco personas, con lo cual ya son ocho. El gobierno Indio les indemnizó con 1 millón de rupias, unos 12.000 $. En cuanto sus planes, está salir este mismo miércoles hacia Nepal donde podrán llegar al aeropuerto de Katmandú y coger un vuelo a Madrid para descansar.
«Cuando lleguemos, iremos al médico para que hagan más pruebas a Fernanda, que ahora está tomando tranquilizantes y le han dado también la pastilla del día después») y de pasar unos días en Brasil con la familia de la mujer, la pareja retomará su tour asiático. Volveremos a la carretera. Cogeremos las motos en Katmandú y, por el Tíbet, recorreremos 4.000 kilómetros hasta Laos. De allí a Camboya, Vietnam y Tailandia. Más adelante, Filipinas e Indonesia. Volaremos hasta Australia, mandando por barco las motos. La idea es acabar en Nueva Zelanda y volver por Corea del Sur y Japón. Seguiremos por Rusia, Mongolia, Kazajistán y Kirguizistán. Luego a España a descansar un poco otra vez y a pensar en el próximo viaje: vamos a recorrer África«.
Este es su futuro, y esperemos que puedan seguir disfrutando de sus motos sin sufrir percances tan graves y lamentables como este en India.