Yamaha sorprendió al mundo en el 2018 con una explosiva y espectacular moto de tres ruedas que ha evolucionado. Hemos disfrutado a fondo la Yamaha Niken GT en una larga ruta, y aquí tienes la prueba.
Efectivamente, Yamaha tuvo el valor de desarrollar una espectacular moto de tres ruedas, pero apartándose de los cánones que todos tenemos de este tipo de motos. Es decir, esa especie de motocarro que permite la agilidad de una moto convencional y puede ser conducida por usuarios de coches por la homologación de carnet A1. Sin duda, esto fue una grandísima ventaja para todos aquellos que están encerrados día tras día en interminables atascos, sobre todo en las grandes ciudades, y de ahí su éxito de ventas. Como sabrás, nos estamos refiriendo especialmente al Piaggio MP3, que cuentan con un tren delantero lleno de bieletas, rótulas y reenvíos que consiguen un comportamiento espectacular, pero con un gran peso en el tren delantero.
Las excelencias de este sistema, junto con otros pequeños detalles como un pedal de frenos estilo coche y un ancho de tren delantero de al menos 460 mm, es lo que permite esa “equiparación técnica” para ser conducido con carnet de coche. Yamaha también tiene su propia familia de estos triciclos-moto para automovilistas, como son las excelentes Tricity (como puedes ver pinchando aquí, la presentación de la Yamaha Tricity 300), pero tuvieron el valor de desarrollar una idea propia. Esto fue desarrollar una moto 3 ruedas «de verdad» con un potente y excitante motor tricilíndrico de 950 centímetros cúbicos con un diseño espectacular, casi futurista, y la tremenda estabilidad y seguridad de un tren delantero de dos ruedas.
Difícil reto, porque además no puede ser conducida con carné de coche al tener especificaciones de moto, pero lo cierto es que llamó muchísimo la atención, hizo correr ríos de tinta y, como he dicho hace un rato, la probamos en su momento. Tras un pequeño período de adaptación , lo cierto es que su comportamiento es espectacular como tal y como puedes leer en la prueba que edité , aunque a nivel de ventas , posiblemente por su diseño tan impactante, no ha llegado a ser el éxito (al menos en nuestro país) que se merece. Pero bueno, lo cierto es que tan mal no debe haber ido cuando se han esforzado en ir desarrollando este concepto, y aquí tenemos su última evolución GT preparada para viajar.
PRUEBA A FONDO YAMAHA NIKEN GT: TRES RUEDAS VIAJERAS.
Ese apellido, GT, que indica que esta Niken está pensada para poder afrontar largos viajes con ella, pero uno de los detalles más importantes de esta “nueva” moto es su motor. Básicamente es el mismo que ya conocíamos, el tricilíndrico CP3 (o sea, Crossplane de tres cilindros) que ya hemos podido disfrutar en motos como la XSR 900, la MT 09
o la Tracer 900 , pero ahora sí cumple las normas euro 5 con todo lo que ellos supone.
Así, para compensar la pérdida de prestaciones, se ha subido de cilindrada, pasando de los 847 centímetros cúbicos anteriores a unos nuevos 890. Es decir, prácticamente ha pasado de ser un “ocho y medio” a una 900. Así, con unas cotas internas de 78 por 62,1 mm, se mantienen las cifras de potencia de 115 caballos. Además, se le han incorporado algunas evoluciones como un cigüeñal más pesado en un 8% para ganar más bajos y medios, además de un embrague anti rebote, o un acelerador totalmente wireless para poder gestionar con todos los complementos electrónicos como el quizá poco refinado de funcionamiento, pero siempre eficaz, cambio semiautomático bidirecional. Por si fuera poco, también se ha inclinado el motor unos 5 grados hacia adelante para mejorar la admisión dentro del curioso chasis multitubular, con TCS control de tracción de tres niveles, QSS y tres modos de potencia (Sport, Street y Rain).
Mantiene un excelente grado de electrónica, fácilmente navegable por la nueva pantalla de 7 pulgadas con un mando tipo joystick en la piña izquierda. También incorpora un sistema para poder cambiar los “skins” de la pantalla, lo que resulta muy divertido.
Aparte, como buena rutera, tiene velocidad de crucero, algo especialmente recomendable en largas rutas. Por otro lado, pequeños detalles como una toma USB y otra tradicional de 12 voltios servirán para mantener dispositivos electrónicos periféricos que quieras instalar, y se mantienen unos muy eficaces puños calefactables.
Por otro lado, se le han incorporado bastantes complementos fundamentalmente útiles para disfrutar de ella en largos viajes. Tiene unas buenas maletas, prácticamente las mismas de la Tracer, con buena capacidad (30 litros) y en las que debes saber cómo colocar un casco integral para que quepa perfectamente, que es totalmente invertido como puedes ver en esta foto. Por lo tanto, si el tuyo tiene alerones superiores o cosas parecidas, ten cuidado. También incorpora una doble palanca en el lado derecho de la pantalla para poder variar su altura 70 milímetros y por tanto la protección del aire.
No obstante, uno de los detalles que más noté y más eficaces considero son los nuevos ajustes de la amortiguación. Bastante más firme detrás, tiene ahora bieletas de aluminio en lugar de acero, y también el chasis se ha reforzado en ciertos puntos.
PRUEBA YAMAHA NIKEN GT 2023: DOS MIL KILÓMETROS DE PRUEBA
¿Cómo hay que probar una verdadera GT? Pues viajando, y aprovechando el verano, no hay nada mejor que hacerte una buena ruta por la costa para probar, disfrutar (o sufrir, que el calor es demoledor) las excelencias de una viajera. Por eso nos fuimos hacia la costa unos cuantos días, comprobando cómo se comportaba tanto en autopista como en carreteras reviradas por la zona de Valencia, Alicante y cercanías.
El sonido bastante agresivo de este tricilíndrico ya lo conocemos todos y, dentro de las 3 curvas de potencia a elegir, la verdad es que casi todo el viaje lo hice en modo Rain. El tacto del acelerador es muchísimo más suave, además de que en ruta sí que logra consumir un poco menos. En el modo Street, sobre todo, el tacto del acelerador es bastante agresivo y requiere cierta adaptación. Puede que bueno en zonas de curvas y en conducción deportiva, pero no en conducción normal, ya sea en ciudad o en carretera.
Sentado sobre ella, tanto el piloto como el pasajero van realmente cómodos (aunque el asiento de atrás parece un poco estrecho), acolchados como un verdadero sofá. Con un carenado delantero ancho que te protege más que de sobra y con el calor del verano, no me hizo mucha falta mantener la pantalla en su punto más alto, algo que será muy de agradecer en invierno.
La combinación velocidad de crucero –motor es otro de sus grandes bazas, puesto que estamos hablando de una moto de 270 kg declarados, más piloto, pasajero y las maletas totalmente llenas. Aquí se nota la brillantez del tricilíndrico “casi 900” y el buen trabajo que los ingenieros de Yamaha han hecho sobre el propulsor, capaz de mantener la velocidad sin ningún problema ya sea cuesta arriba, en un puerto realmente empinado o donde quieras. Los consumos medios, a velocidades de ruta, el ordenador de a bordo lo cuantificó en 6,6 litros de media, lo cual está perfectamente teniendo en cuenta las condiciones generales del viaje.
Tras los primeros 600 kilómetros, llegamos a nuestro destino y comenzamos a planear las rutas que haríamos por los alrededores. Aprovechamos para visitar el museo de motos Históricas Valle del Guadalest, situado en las profundidades de la sierra cercana a Alicante, una exposición preciosa que te recomiendo visitar cuando puedas. En estas zonas, con el ángulo máximo de inclinación declarado por la marca de 45 grados, sientes cierta tendencia a subvirar en las curvas muy cerradas, pero te advierto que también esto es una cuestión de acostumbrarse al voluminoso tren delantero que se parece mucho al tacto de una moto normal… pero no es igual. Requiere un cierto periodo de adaptación, y al principio noté el tren trasero un poco blando, pero se solucionó rápido con el pomo de precarga remota que tiene el amortiguador. En esas condiciones, como también había notado en las autopistas y carreteras nacionales como la Niken se nota ahora bastante más estable tanto en recta como en curvas, y también en asfalto que no está en perfecto estado.
En resumidas cuentas, la moto se la nota más aplomada y predecible tanto en inclinación como en aceleración. Como digo, también en zonas reviradas el tacto del modo Street me pareció demasiado agresivo y, con una aceleración realmente espectacular, tanta agresividad tiende a abrirte un poco fuera de la curva si no estás muy acostumbrado, incluso más que en el modo “full”, el Sport ¡Curioso!
Hablemos de la estética. Cuando llegas a cualquier sitio, ¡no cuentes con pasar desapercibido!, incluso en el color estrictamente negro de nuestra unidad de pruebas. Desde luego, me recuerda a la moto del juez Dredd- como puedes ver en esta foto– el famoso y justiciero personaje de cómic que ya cuenta con dos películas (la segunda bastante mejor que la primera, por cierto) y que se mueve por la apocalíptica ciudad de Megacity con una impresionante moto, como nuestra unidad de pruebas de la Niken GT.
Es una moto rápida, potente y muy estable, y que ahora ha ganado muchos puntos como rutera. Además, no es nada sensible al viento lateral a pesar de tener ruedas delanteras de 15 pulgadas, y su gran sección lateral. La sensación de estar pegado al suelo del tren delantero de doble rueda hace maravillas, y a pesar de las violentas rachas de viento que pillé tanto en carretera como en autopista, la Niken se mantenía por su trazada como si no le afectase absolutamente nada. Eso sí, un detalle que yo mejoraría claramente es el sistema de cálculo de autonomía. Básicamente, no lo tiene, porque simplemente comienza una cuenta de los kilómetros cuando llegas al último tramo de reserva, lo cual no te deja calcular con facilidad cuando debes parar de echar gasolina. Yo paraba cuando llegaba al último tramo de la escala de gasolina, y me cabían entre siete y ocho litros (18 de capacidad declarados), por lo que podía esperar muchos más kilómetros a repostar… Pero el fantasma de no saber cuántos kilómetros te quedan (aunque sea un cálculo aproximado, como suelen ofrecer estos sistemas) te empieza a preocuparse según bajan los puntos de la escala.
PRUEBA YAMAHA NIKEN GT 2023: CONCLUSIÓN
Esta Yamaha Niken es, desde luego, una opción perfecta para tener una moto rápida, con multitud de información electrónica, y que cuenta también (como es habitual últimamente) con la posibilidad de parear tu móvil con la pantalla digital gracias a aplicaciones externas (gratuitas, claro) como el Yamaha My Ride. Cómoda, muy estable, y con complementos de buena rutera que la hacen una opción excelente por menos de 20.000 euros, 19.599 concretamente. Está claro que ofrece un plus de seguridad por su monolítico tren delantero, que a unos puede gustar y a otros no, pero que desde luego cumple lo que promete y lo que te esperas de él. Desde luego, yo os puedo decir que disfrute de estos 2.000 kilómetros de viaje veraniego como con pocas otras motos, y que fue cómoda en los tramos largos y divertida cuando me apetecía una conducción más deportiva, con lo cual estamos ante un producto perfecto, con el que te repito que no pasarás desapercibido allá por donde vayas.
PRUEBA YAMAHA NIKEN GT 2023: LIKE-NO LIKE
LIKE: protección en marcha. Estabilidad incluso con viento lateral. Menú electrónico muy completo.
NO LIKE: medidor de autonomía. Tacto agresivo del acelerador en modo Street. Necesitas adaptación para disfrutar de las excelencias del tren delantero.
FOTOS PRUEBA YAMAHA NIKEN GT