En el anterior reportaje sobre la presentación de la nueva Harley Davidson para PanAmerica 1250, pudiste ver todo el análisis técnico, ¡y aquí tienes la prueba a fondo y nuestra opinión!

Equipo de pruebas: Acerbis

Sin duda, una de las grandes ventajas de la vuelta a la “normalidad” en el periodismo el motor es el regreso a las presentaciones “reales”, y no tanta presentación online vía Zoom, videoconferencia o cosas parecidas. Como verás en el reportaje que hicimos en su momento (pincha aquí), la PanAmerica 1250 ya tuvo su presentación virtual, pero todos los allí reunidos estábamos locos por probar lo que Harley había sido capaz de hacer en un segmento tan absolutamente nuevo para los chicos de Milwaukee.

Por eso, antes de nada me puse a estudiar con detalle cada uno de los elementos, los detalles de los anclajes del chasis, a navegar en parado a través del nutrido equipamiento electrónico y mecánico que nos ofrece, y comprobar todo lo posible. En la primera parte del reportaje de esta presentación, que puedes ver pinchando aquí, puedes ver y cionsuktar toda la inacabable tecnología de esta Harley Davidson PanAmerica 1250.

Cuando llegó el momento de rodar sobre ella, la verdad es que fue ciertamente emocionante porque sabíamos que estábamos ante un nuevo paso histórico en una marca tan legendaria como Harley Davidson, lo que es mucho. Así, moviendo simplemente el botón de la piña derecha al punto adecuado (la llave es wireless, como te puedes imaginar, por lo que solamente tengo que llevarla en el bolsillo) presionas y el sonido del motor te sorprende, entre otras cosas porque no sabía muy bien que esperar de él. Se me antojó como una mezcla perfecta entre el rugir clásico de los grandes pistones americanos de un motor Big Twin con un toque electrónico totalmente nuevo. Algo así como Jean Michel Jarre tocando música clásica.

Salgo dosificando el embrague para cogerle el tacto y la verdad es que la entrega en bajos y medios es simplemente perfecta desde el primer instante, nada de las coces y brusquedades de un motor de aire convencional de Milwaukee. Por lo tanto, perfecto para zonas de baja velocidad y ciudad, pero rápidamente llegamos a una autovía donde poder roscar el acelerador a ver qué había más allá de las 5. 000 o 6. 000 revoluciones. Ahí, especialmente en el modo sport, justo a la 6. 000 sientes un tirón realmente adrenalínico y deportivo, lo que le da un tacto “sport” a ésta trail que haría hervir la sangre incluso de un zombi, y estar casi la altura de muchas bicilíndricas deportivas.

Curiosamente, y a pesar de su peso muy en línea con la competencia, en marcha se me antojaba mucho más ligera y manejable que lo que puedo recordar de otras megatrail, e incluso en parado era bastante fácil de mover. En cuanto a la comodidad, su aparatoso frontal cumple exactamente lo que esperar de él: una protección absolutamente perfecta para hacer de esta PanAmerica una excelente rutera. El mando de altura de la pantalla, situado en el lado izquierdo, no está al nivel de calidad del resto de la moto. Es de plástico bastante poco sólido y que me apostaría que se deformará con el calor cuando llegue a las altas temperaturas en sitios como Almería, aunque el diseño del mecanismo no es malo. Lo cierto, es que con un poco de tacto logre subir y bajar la pantalla, demostrando su efectividad absoluta para protegerte de los elementos… Porque no sé si te lo he dicho, pero también nos llovió.

Y claro, llegamos a zonas tremendamente reviradas, donde nos sorprendió aún más. Como digo, en carretera parece tremendamente ligera, también direccional y con una dosificabilidad de acelerador perfecta. Por cierto, las unidades no tenían mucho rodaje y había especialmente una unidad (precisamente la PanAmerica que equipaba estándar con amortiguación convencional) que aceleraba absolutamente como una bestia, digna de rivalizar con cualquier naked sport. Esto se debe sin duda a las diferencias de ajuste que ahí cuando todavía no llevan muchos kilómetros, pero como sea una señal de lo que es capaz de acelerar este motor con el rodaje terminado, ¡que Dios nos asista!

Jugando con los controles electrónicos, notas como su regulación es la adecuada y puedes adaptarla a cualquier entorno en el que estés rodando.

Y aquí llegamos a las zonas off road. A pesar de su peso y su altura (yo regule el ARH para que bajase de altura al parar, no fuera a ser que me hiciera pie en la irregular superficie del Enduro Park de Valencia) ruedas tremendamente seguro sobre ella, entre otras cosas porque tiene una considerable longitud entre ejes, pero también por todo el conjunto que logra combinar manejabilidad con tracción de una forma impecable, y sin apenas vibraciones. Además, en el modo Off Road “normal” parece poder subir todo lo que se te ponga por delante con una suavidad y un agarre difícilmente descriptible. Por otro lado, las prestaciones y recuperaciones están fuera de toda duda como te puedes imaginar con un motor de esas características.

Y, detalle fundamental, los precios. La versión básica cuesta 16.990€, pero la Special con todas las ayudas electrónicas incluyendo la amortiguación, solamente 19.600€. Sin duda, estos contenidos precios (para el segmento que estamos hablando, claro) pueden ser la llave definitiva al éxito de ventas de la PanAmerica. Bueno, y no te cuento todo lo que puedes elegir en el como siempre inacabable catálogo de complementos Harley Davidson, que en esta ocasión no serán solamente estéticos, sino muchísimos técnicos como el contenido, ligero y elegante escape Screamin ´Eagle que pudimos probar también durante la presentación.

Por supuesto, personalmente estoy deseando poder tener una unidad de pruebas para poderla tener en un uso más “real”, diario y cercano y poder comprobar su calidad en el entorno en que todo el mundo la pausa. Es decir, el suyo propio y te permita saber su funcionamiento por las mañanas cuando la arrancas en frío, ir al cine con pasajero detrás como meterte un buen viaje, aparte de incursiones camperas… Y me apostaría que incluso en algún cursillo de circuito está Harley cumple más de lo que te puedas imaginar. Por eso no me extraña que la próxima novedad sobre la que Harley Davidson está lanzando los primeros “globos sonda” para la próxima temporada es una preciosa “Muscle Roadster Sport” denominada Harley Davidson Bronx. ¿Será así?

Con la base que hemos conocido con la PanAmerica, esta Bronx puede ser otro nivel. El tiempo nos dirá y seguiremos informando.

PRUEBA PRESENTACIÓN HARLEY DAVIDSON PANAMERICA 1250: LIKE-NO LIKE

LIKE: Motor. Tecnología. Chasis y amortiguación.

NO LIKE: frontal de estética discutible. Mando de regulación altura de pantalla. Ausencia de cambio semiautomático.