Si eres de l@s que realmente montan y usan su moto en cualquier época del año, en invierno no bajes la guardia. Es fundamental, incluso más que con buen tiempo, revisar bien todos los niveles de agua, vigilar la viscosidad y el nivel del aceite, no olvidar mirar el estado y la presión de las ruedas. Además, con la nieve acechando o apareciendo, las carreteras se llenan de sal para evitar las grandes placas heladas, lo cual afecta a todas partes metálicas de tu moto, y eso sólo se evita lavándola.

También aquí entra el mantenimiento de la cadena (los que disfrutan de una buena correa o cardán, de esto se libran), porque el agua de la lluvia y esa sal de la que hablamos antes, aceleran mucho la oxidación. Así que, ¡cuidado con ello!

Así, si quieren mantener tu montura en perfecto estado y rodar seguro, no te pierdas este reportaje que tienes aquí

Podrás ver los detalles del mantenimiento y cómo hacerlo sin ningún problema. Por supuesto, no hay nada mejor que llevarlo a un buen taller con profesionales y todo tipo de materiales, pero no nos engañemos: muchas veces no tenemos tiempo de llevarla, tenerla allí unos días hasta que la recojamos. Muchos también aducen que lo revisan ellos mismos porque le sale más barato, teniendo en cuenta que en el taller ya tienen todos los enseres, herramientas y productos, yo no estaría tan seguro de eso.

Además, nos gusta “meter mano” a nuestra propia moto porque nos gusta. Además, los pequeños grandes detalles que descubrimos “mecanicaqueando” en nuestras motos, nos ayudan a conocer la mejor y a solucionar problemas que nos puedan surgir cuando montamos, ya sea en ruta, en circuito o donde se tercie.

Pues ya sabes: sea en un taller o tu mism@, mantén tu moto en perfecto estado antes de montar con tanto frío