Una moto minimalista y oscura, monoplaza sin vuelta atrás, una moto para solteros y valientes. Así es la Triumph Bobber Black, que evoluciona de la Bobber estándar y que pone como fábrica a Triumph en su justo punto.

Chica Pin Up: Luz María Acevedo ¡Gracias!

Desde luego, poner en marcha la fabricación y comercialización de una moto tan radical no está al alcance de cualquier fábrica, sólo de aquellas que tienen la tradición y el nombre para poder venderlas. ¿Quién compraría una moto que solo tiene un asiento y de estética tan personal como una Bobber? Pues todos aquellos y aquellas que sienten la moto como un placer solitario (por muy mal que suene esto…), pero además hay que tener en cuenta el “efecto llamada” de una moto de filosofía tan “rebelde” para el público que también quiere serlo… pero no puede.

Prueba Triumph Bobber Black 2018 MotorADN (24)

Entonces, van a verla y se llevan otra Triumph similar pero menos minimalista. Para comprobar esta teoría mía, me acerqué al (gran) concesionario de Triumph en la capital a hablar con Marcel Barrilero, el gestor de todo aquello y motorista mucho más que experimentado.

Efectivamente, las Bobber atraen mucho público, muchos admiradores que después en el concesionario se pueden decantar por ejemplo por una Boneville… Aunque se vende más de lo que se podría pensar en un principio. Pero empecemos por un detalle, ¿qué es una Bobber? Bueno, pues básicamente una custom muy radical, con asiento muy bajo y totalmente monoplaza. Para motoristas duros y lobo solitarios del asfalto.

Prueba TRIUMPH BONEVILLE BOBBER 2017: una moto valiente

De hecho, su origen está en las custom más radicales que se hicieron artesanalmente tras la Segunda Guerra Mundial y Vietnam, al regresar todas las motos de la contienda que fueron comprados por muchos veteranos e hicieron motos totalmente personalizadas mezclando piezas unas de otras. ¡Puro espíritu de los 50 y 60´s!

Como verás, nunca buscaron ser motos polivalentes y agradables, sino artesanales y duras. No obstante, en su momento probamos la Triumph Bobber estándar donde ya comentábamos todo esto con más detalle. No te la pierdas y si quieres repasarla pincha aquí.

 

PRUEBA TRIUMPH BOBBER BLACK 2018: ya sabes lo que hay

Después de lo que has podido leer hasta ahora, queda claro que si buscas una Bobber, sabes lo que hay. No puedes llevar pasajero, para viajar (en principio) no es una buena opción porque no tienen ninguna protección aerodinámica, para llevar equipaje tampoco está pensada,  pero su estética es tan atractiva y tan seductora que, no nos engañemos, todos desearíamos tener una. Bueno, yo personalmente me lo estoy pensando, así que quien sabe si dentro de unos meses…

Pero claro, aparte de la estética, la moto tiene que ir bien. Su motor y su parte ciclo tienen que ser modernas. Así te remito de nuevo a la prueba de la Triumph Bobber estándar donde lo analizamos con detalle. No obstante, recordemos que su motor es el gran bicilíndrico paralelo 1200 calado a 270° con un par de años de vida que anima también a otras excelentes motos británicas y que sustituye al anterior 900 con la misma configuración pero refrigerado por aire y tecnología mucho más simple.

Prueba Triumph Bobber Black 2018 MotorADN (3)

Así, para mejorar las prestaciones (y pasar la normativa Euro4, no lo olvidemos) incorpora 8 válvulas y refrigeración líquida.  También podemos verlo en la Thruxton, la deportiva de la gama retro de Triumph. No obstante, hay una gran diferencia, porque estos motores tienen dos variantes: HT y HP. Las primeras siglas significan High Torque, Alto Par, por lo que proporciona 77 CV a 6. 100 revoluciones por su lado, el HP (High Power, Alta Potencia) da 97 CV a 6750 revoluciones. Es decir, más potencia a más revoluciones. Así, el carácter de la Bobber Black impone la primera opción con una contundente respuesta abajo y medio régimen.

Prueba Triumph Bobber Black 2018 MotorADN (13)

El asiento monoplaza hace que la moto no tenga subchasis, por lo que no es una moto normal a la que se ha quitado el asiento trasero, sino directamente una moto monoplaza homologada para una sola persona. O sea, que siempre será una moto disfrutable por su dueño y nadie más. Por esto, la documentación tienes que llevarla siempre en el bolsillo, ¡porque desde luego debajo del asiento no!

Prueba Triumph Bobber Black 2018 MotorADN (93)

La ergonomía es importante, y por ello el asiento también es regulable para adaptarla a la fisonomía del piloto de forma que puedes colocarte más alto y adelantado o bajo y atrasado, depende de tu estado de ánimo cuando quieras darte una vuelta. El amortiguador se encuentra colocado bajo este asiento para darle un toque estético de “chasis rígido”, y se encuentra en posición casi horizontal justo debajo del asiento, de forma que funciona por bieletas.

Ficha técnica Triumph Bobber Black 2018

En a sus características generales, son básicamente las mismas de la versión estándar, pero se añaden pequeños complementos y diferencias que a la hora de rodar se muestran muy importantes. La gran mayoría de ellas se centran en el tren delantero, donde se pasa de una horquilla de 41 mm de diámetro una Showa de 47, lo que de momento ya nos asegura más rigidez y, como las dos Bobber, tiene unos fuelles protegiendo las barras que además del detalle técnico  quedan preciosos. No obstante, posiblemente el cambio más notable sea la llanta delantera, que pasa de las 19 pulgadas de la estándar a las 16 con una llanta multi radios con el neumático 130-90. Así, se busca más agilidad y un carácter más, digamos, “sport”.

Prueba Triumph Bobber Black 2018 MotorADN (2)

Por otro lado, la Triumph Bobber Black también tiene muchos complementos electrónicos que son opcionales en su hermana, como el control de tracción regulable en dos niveles y los puños calefactores de serie… Pequeño gran detalle cuando hace frío y tienes una moto sin absolutamente ninguna protección delante. Además, tiene dos curvas de potencia, Road y Rain, que como todas las ayudas son regulables por los botones de la piña derecha. Todos los datos se pueden ver a través de una pantalla digital (muy bien diseñada por cierto, con todos los datos mostrados muy claramente) insertada en el gran velocímetro central redondo de estilo clásico.

Y el detalle definitivo: su nombre no engaña a nadie y la moto es totalmente negra, dese los escapes hasta gran parte del motor. Negro absoluto.

PRUEBA TRIUMPH BOBBER BLACK 2018: lobo solitario

Las Triumph siempre han sido algo especial dentro del mundo custom. Desde su aparición, se notaba que sus diseñadores (y su tradición) estaban muy centrados en diseñar motos que tuvieran un buen comportamiento dinámico, no solamente que llamasen la atención por un bulevar. Desde luego, esta filosofía se muestra sorprendentemente en las Triumph Bobber, y especialmente en esta Black. Ya la “básica” me sorprendió por su comportamiento en curvas, su capacidad de frenada e incluso su facilidad para cambiar de dirección, a pesar de que no es una moto ligera con 228 kilos, pero sí con un centro de gravedad muy bajo. Así, con todos sus pequeños grandes nuevos detalles, la Triumph Bobber Black va a un claramente mejor.

Fotos Triumph Bobber Black 2018 prueba MotorADN

La rueda de 16 pulgadas tiene menos efectos giroscópico que la de 19 y, lógicamente, es mucho más fácil de cambiar de dirección, manteniendo la estabilidad en la recta y en grandes aceleraciones. A pesar de tener 77 CV, el buen par y el excelente tacto del acelerador te permite salir traccionando de casi cualquier curva y dar gas mucho antes de lo que piensas, por lo que realmente es una moto divertida en curvas, no solamente impresionante cuando la aparcas. Por cierto, te aviso que no es una moto para pasar desapercibido precisamente. Vayas donde vayas, siempre pareces el tío (o tía) más duro de la reunión, el bar, la fiesta o donde sea que estés llegando.

2017 Triumph Bonnerville Bobber Press Launch - Málaga Worldwide Copyright: ©Triumph

Además, los ingenieros ingleses no han caído en la trampa del gigantismo, que casi obliga a muchos diseñadores a colocar neumáticos traseros totalmente descomunales que pueden quedar bien estéticamente, pero que dinámicamente son un crimen. Con el 150 trasero inclinas todo lo que debes antes de rozar las estriberas con mucha más facilidad que con una rueda más ancha. No me imagino lo que sería esta moto con llantas de 17 pulgadas…

Prueba Triumph Bobber Black 2018 MotorADN (14)

Por supuesto, la horquilla es más gruesa y por lo tanto mucho más rígida. Por ello, puedes frenar todavía con más fuerza sin notar hundimientos extraños. El amortiguador trasero, con poco recorrido y bieletas, se porta también como recordaba de la Bobber estándar, y probado no olvides que puedes adaptar la ergonomía  (algo delicado la mayoría de las veces en una custom) a tu altura de tus pretensiones. ¿Quiere rutear?, Pues te colocas el asiento más bajo y vas casi como en una chopper. ¿Zona de curvas? , pues lo elevas y tienes más control de la dirección.

Prueba Triumph Bobber Black 2018 MotorADN (12)

Como cualquier custom sin ni siquiera una mísera cúpula delante, el aire te empieza presionar seriamente a partir de unos 130 por hora, y jugando con los modos de potencia nos estuvimos moviendo entre 4,5 y 5,6 l/100 km. Un consumo realmente bueno para sus prestaciones, porque la Triumph Bobber Black empuja y corre. Más de lo que tu cuello es capaz de soportar.

Fotos Triumph Bobber Black 2018 prueba MotorADN

Por otro lado, las ayudas electrónicas de Triumph se comportan impecablemente en todos sus modelos, pero su buen ajuste de fábrica y su intrusismo son realmente perfectos para la Bobber. Fácil de regular, apenas notas que entren con demasiada antelación, y sólo en frenadas un poco pasado o con el suelo en muy mal estado noté realmente la entrada del ABS o del control de tracción. Impecable.

PRUEBA TRIUMPH BOBBER BLACK 2018: conclusión

La Bobber Black esta estupendamente bien rematada y terminada, como básicamente todas las motos de Triumph. Estos detalles refuerzan su imagen de solidez y calidad, algo fundamental en una moto de aspecto tan duro como esta. Lo cierto es que nada desentona, y desde el último tornillo hasta el remate de los inyectores (insertados en cajas de carburadores clásicos por estética, no lo olvides) o la calidad de las manetas, es realmente una moto deliciosa de probar.

Elegante, impresionante, bien diseñada y con un comportamiento dinámico y de motor admirables, cuesta 14.600 €, 1100 más que su hermana estándar. Gran trabajo hecho por Triumph para una moto tan minoritaria, pero tan admirada por todos, como esta Triumph Bobber Black.

PRUEBA TRIUMPH BOBBER BLACK 2018: LIKE-NO LIKE LIKE-NO LIKE

LIKE: diseño. Comportamiento dinámico. Ergonomía ajustable

NO LIKE: sin pasajero. Capacidad rutera. Protección aerodinámica.

Fotos prueba Triumph Bobber Black 2018 MotorADN