Mucho se ha dicho y escrito sobre la Ducati Diavel desde su aparición, algo que no es de extrañar teniendo en cuenta sus prestaciones y su diseño espectacular y casi animal. Además, con la última versión, la XDiavel, parece haberse girado un poco hacia el gusto americano por las grandes cruiser y muscle bikes. Muchos se sorprendieron de ello, y pusieron el grito en el cielo porque Ducati iba empezar a diseñar y fabricar motos custom. Claro que en este momento habría que aclarar si la XDiavel es la primera custom de la marca creadora de las Pantah, la 916 o las Panigale.

¿Tú que crees?

Historias, mitos y realidades.

Bueno, muchos os sorprenderéis  de que las palabras Ducati y custom o cruiser aparezcan en la misma frase. Nunca Ducati había creado una custom, pensarás… Pero te equivocas.  Recuerdo cuando era muy pequeño y pasaba cerca del escaparate de Cantó, una de las tiendas más importantes de Madrid en aquellos años, y podía haber una espectacular custom negra, de manillar alto y con la marca Ducati orgullosamente grabada de su depósito.

¿Cómo puede ser? Pues sí. Los Castiglioni, dueños de Cagiva y Ducati en aquel momento, querían entrar fuerte en el mercado americano y en el custom en general, puesto que en aquel momento comenzaba a entrar con cierta fuerza en Europa y algún que otro modelo italiano  (Morini Excalibur, por ejemplo) y también las japonesas, que estaban empezando entrar fuerte con modelos como la Yamaha Virago o la Honda Shadow, se vendían bien.

Esa Ducati puramente custom se llamó Indiana y se fabricó entre cilindradas: 350,650 y 750. La base del motor era la Pantah con cinco velocidades y daba hasta 60 CV, por lo cual las prestaciones estaban muy por encima de la competencia de la época. Se fabricó de 1986 hasta 1990, y se ha quedado para la historia como una de las auténticas “rara avis” de la marca.

El misterio del espacio

Pero eso no es todo. A principios de los 60, Ducati tenía un fuerte importador en Estados Unidos, Joe Berliner. Así se decidió crear una moto pensada para Estados Unidos y que sirviera tanto para la policía como para dar un golpe de efecto en el mercado. En Ducati no se andan con chiquitas, y Fabio Taglioni desarrolló un gigantesco V4 a 90° con 100 caballos de potencia. Tanta potencia necesitaba mucha moto, y esta moto se llamó Apollo aprovechando la fiebre existe en aquel momento por la carrera espacial entre Estados Unidos y Rusia.

Tengamos en cuenta que hasta ese momento, Ducati sólo hacía motos de hasta 350 cm³, por lo que desarrollar esta moto fue una verdadera proeza y reto tecnológico. El problema fue que la moto pesaba y, sobre todo, corría mucho, y tampoco había neumáticos en aquel momento que aguantarán tantos kilos y caballos. A esta motor envuelve una verdadera leyenda misteriosa, porque básicamente sólo se fabricaron dos, de la que sobrevivió sólo una que actualmente pertenece a un millonario japonés de nombre desconocido.

Toda la leyenda que rodea a la Apollo se refuerza con el hecho de que fue la primera vez que Ducati fabricaba motor grande y, con el tiempo, fue el origen del V2 a 90° con distribución Desmo que ha equipado a toda la familia Ducati desde entonces.

Como veis, la XDiavel es una gran moto, pero no es ni mucho menos la primera custom que ha salido de Borgo Panigale.