Los pantalones de invierno van ocupar el tercer reportaje de nuestros especiales sobre la equipación, moto y frío. No me digas que alguna vez, de esas que montas en pleno invierno con un frío infernal,  no te ha ocurrido que apenas podías andar cuando te bajaste de tu moto porque las tenías casi congeladas.

Es uno de los puntos más críticos y difíciles de proteger de nuestro cuerpo a la hora de montar en moto y, curiosamente, unos de los menos atendidos habitualmente. Las piernas reciben gran parte del barrido del aire que recibimos  y, excepto en muy pocas motos que tienen un carenado o una forma de depósito suficientemente envolvente para que el frío no las barra de lleno, sufren mucho las inclemencias y la dureza de las bajas temperaturas. Si eres de esos que monta todo el año, sabrás perfectamente de lo que te estoy hablando…

Tecnología

La técnica a la hora de fabricar pantalones para montar en moto en invierno tiene un camino prácticamente único. El material más usado por excelencia es la Cordura, que como sabrás también se usa en chaquetas y otras prendas. No obstante, en los pantalones parece que hay muy poca discusión sobre su efectividad cuando llega el mal tiempo porque logran ser impermeables, suficientemente flexibles para permitirte doblar las piernas, y además permiten llevar forro interior térmico fácilmente desmontable que es lo que realmente nos aísla del frío. Este forro interior y que suele estar fabricado con fibras diferentes dependiendo del fabricante.

Por otro lado, la Cordura es impermeable, por lo que es corta vientos y un aislante perfecto de la lluvia. De hecho, en cuanto a la temperatura no es realmente fría, muchas veces se usa sin ese forro interior que, eso sí, aumenta su grosor y nos hace tener ciertos andares de payaso.

Además, la Cordura, sea del grosor que sea, permite integrar bien los habituales bolsillos laterales y traseros, y en algunos modelos también a la altura de las rodillas para no tener que bajarnos de la moto para coger algún elemento grande como el móvil, la cartera o unas llaves.

Fotos MOTOS, INVIERNO Y EQUIPACIÓN 3: Pantalones

El único problema real de la Cordura es su relativa rigidez -aunque esto depende mucho del tipo de Cordura usado- y es muy habitual que muchos usuarios (y usuarias…) elijan unos demasiado ajustados porque al comprárselos se los prueban de pie y no en la posición flexionada natural  cuando montas en moto. Como todos sabemos, además, la posición del pasajero suele ser más forzada que la del propio piloto y l@s paquetes son los que más suelen pecar por este síndrome de “me compro este, que me hace buen culo y me sienta muy bien”. Cuando tienen que montar en el asiento trasero, apenas pueden respirar. Así que ya sabes como debes probarte unos pantalones nuevos de Cordura…

Detalles

Básicamente, en los pantalones de Cordura hay dos grandes grupos. El primero es el de los pantalones de corte normal, que llegan por la cintura sin más. Como segundo, están los que llevan tirantes incorporados o son tipo peto, con lo cual también protegen el estómago y parte del pecho. Lógicamente, estos son más voluminosos y son más indicados para los más ruteros y viajes más o menos largos. Ambos, en cuanto son de cierta calidad, incorporan en la zona lumbar una cremallera para unirlo a la chaqueta y evitar que la espalda se nos quede descubierta. Lógicamente, si ambas prendas son de diferentes marcas, es posible que las cremalleras sean diferentes o simplemente no tengan el mismo largo.

En cuanto la protección, todos conocemos la resistencia a la abrasión de la Cordura, pero no debemos olvidar que también llevan protecciones interiores en rodillas y cadera. Cuando te los compres, comprueba la calidad de estas protecciones, que sean suficientemente flexibles y también que sean extraíbles. Así, por ejemplo, cuando llegues a tu destino (que puede ser  una concentración) puedas extraer las para pasear por la zona de acampada mucho más cómodamente.

Todos estos detalles los pueds ver perfectamente en este video ¡No te lo pierdas!

Más detalles a comprobar. La cintura debe ser ajustable con velcro en los laterales, por ejemplo, y las cremalleras deben tener tapetas interiores o exteriores para evitar que entre el frío y el agua. También en la zona del tobillo tiene que tener ajuste y una larga cremallera que nos permita abrir lo suficiente la pernera para poder ponernos el pantalón incluso con botas si es necesario.

Un último detalle es que, si el frío es siberiano- vamos, como si vas a Burgos o León a principios de enero-puedes incluso vestir mallas interiores térmicas. Estas mismas mallas también las puedes usar a diario, cuando tienes que vestir más de sport, debajo de tus pantalones vaqueros… Que también deberían ser especiales de moto con protecciones, pero eso es otra historia

El próximo

Nuestra serie de reportajes sobre la mejor equipación invernal no ha terminado. El siguiente será sobre guantes. ¿Quieres saber cómo llevar siempre las manos calientes?, pues no te lo pierdas