Equipación: MT Helmets , Seventy Degrees

Con un chasis multitubular, la Z900 rompía la estructura habitual en la serie de naked populares de Kawasaki, que solían usar uno de espina central. Muy bueno para estrechar la moto y hacerla manejable, perfecta para aprender al acceder a tu primera moto “grande”, pero muy justa en cuanto a estabilidad. Aquí llegó la 900 que combinaba todo, y desde su aparición en el 2017, se ha convertido con toda razón, un éxito de ventas y de público. Realmente, una muy buena moto de tacto ligero, una naked de diseño agresivo típicamente Kawasaki que, con las mismas líneas, se ha ido renovando. Así, este año ha disfrutado de otra evolución, aunque esta temporada disfrutamos de avances técnicos realmente importantes. Veamos cuales son.

Está claro que una moto como la Kawasaki Z900 siempre tiende a mejorar, entre otras cosas, en el plano deportivo, en este caso, más bien sport. No olvidemos que, por su éxito de ventas, estamos ante una de las máximas representantes, del segmento de las naked sport… casi una Street-Fighter. Continúa con su chasis multitubular, verde brillante en nuestra unidad de pruebas, con el motor tetracilíndrico característico de las Z “grandes” con 948 cm³. Es decir, se denomina 900 pero estamos prácticamente ante un “nueve y medio” que apenas declara mejorías cuanto a potencia con sus 124 CV declarados, aunque cumple ya todas las características de emisiones y similares para la norma Euro5+.

Eso sí, se ha mejorado la respuesta en medios y, en la práctica, también en bajos, puntos importantes en disfrutar del pilotaje de una naked deportiva de cilindrada media. Esto asegura una reducción de emisiones y consumo, con un par de 98,6 Nm. Uno de los grandes detalles del éxito de este modelo ha sido que siempre sido limitable para el carnet A2, y ahora no podía fallar esta versión de 70 kW o 95 CV, de forma que se puede limitar a la mitad para los que quieran acceder a ella con el carnet recién conseguido.

Además, y este detalle es fundamental, se incorpora un efectivo cambio semiautomático bidireccional (lo que los más “cool” llaman quickshifter), detalle que se echaba en falta anteriormente. Por si acaso vas a darle un uso turístico, otro paso fundamental es la incorporación de control de velocidad. Fantásticamente efectivo, como sabrás si lo tienes en tu moto, para poder hacer largas rutas con mucho más relax que si tienes que estar roscando el acelerador.

En cuanto a su comportamiento, un detalle básico es que ahora incorpora plataforma inercial IMU (si no sabes que es una IMU, pincha en este enlace, que te lo explico detalladamente), por lo que todas sus ayudas electrónicas son mucho más efectivas y modernas.

Con acelerador electrónico, cuenta con control de tracción regulable en tres niveles y cuatro modos de conducción con sus 3 curvas de potencia, todo ello fácilmente seleccionables mediante la piña izquierda. Puedes verlo y comprobarlo todo claramente con su nueva pantalla TFT que pasa de 4,3″ a 5″.

Más detalles. Ahora contamos con pinzas delanteras radiales, un asiento más plano con motivos decorativos, como la chapa incrustada que puedes ver en esta foto, y también un diseño delantero todavía más afilado que el anterior, como otros modelos Kawasaki, este también cuenta con una versión con más “chuches”, denominada SE de Special Edition. Esta te recompensa con las mismas pinzas delanteras de la explosiva Kawasaki Z H2 y una bomba radial Nissin, aunque detalle más importante es un amortiguador trasero Öhlins S46. Además, su decoración es diferente y cuenta con una toma de corriente USB-C.

Por último, tiene compatibilidad con la aplicación Rideology como navegador y hasta permite al piloto controlar algunas funciones por voz, todo esto previo pago aparte del precio base.

Una ley que sport siempre suele recompensar los con un comportamiento divertido, nada cansado, y que te ofrece grandes recompensas. Pues aquí también, pero elevado a la enésima potencia.

Por un precio razonable, 10.325 euros y 9. 999 € el modelo limitado A2, (en el momento de escribir esta prueba) disfrutas de una moto de aspecto impresionante y que, a pesar de su agresivo perfil, gusta absolutamente a todo el mundo según pude comprobar a lo largo de esta prueba. Podríamos denominarla como una moto elegantemente agresiva, pero que capta miradas y que realmente gusta, al menos en esta combinación negra y verde clásica de Kawasaki.

El motor cobra vida con tanta efectividad como los anteriores modelos, acelerándose un poco en frío hasta que coge temperatura. Desde ahí, es realmente utilizable, y no sabría decirte si tiene más bajos y medios que anteriores modelos (pincha aquí para leer la prueba), pero desde luego te puedo decir que es un ejemplo de efectividad. Para rodar por ciudad en el modo Rain o hacerte disparar la adrenalina en el modo Sport, todo lo hace bien y el motor es una verdadera delicia, con un acelerador con holgura 0 al ser electrónico. Además, y como buena naked, parece fantásticamente ligera y manejable, porque incluso en conducción muy deportiva se te hacen tremendamente fácil y nada cansado de pilotar.

Por cierto, a este respecto recuerda que, aparte de las excelencias de su cambio semiautomático bidireccional, sin duda uno de los grandes avances del mundo de motociclismo los últimos años, cuenta con un embrague anti rebote. Esto quiere decir que, cuando llegas una curva, puedes bajar marchas como una ametralladora sin embragar, con la mayor facilidad y sin temor a que la rueda trasera te rebote. Personalmente, lo probé a verdadera “mala leche” en varias curvas de un recorrido realmente ratonero, y todo fue como la seda. A todo esto se suma que su peso total declarado es de 193 kilos, por lo que realmente es una moto ligera pero sólida y estable tanto alta velocidad como en uso deportivo, saliendo de las curvas acelerando tanto como puedas. Para rodar rápido, apreté tanto el muelle como el hidráulico de compresión del amortiguador de serie, y en este caso pensé que el Öhlins de la versión SE hubiera sido una estupenda ayuda por, entre otras cosas, su regulación remota de la precarga… Vamos, que con esto te quiero alentar a que es, si te decides por esta estupenda Kawasaki Z900 nueva, te estires un poco y te decidas por ella. Por cierto, esta versión especial cuesta 12.475 €.

En cuanto a consumos, de media y alternando conducción urbana con tramos un poco, digamos, más “alegres” de montaña (esta vez no la probé en circuito), el total fue de 5,9. Bueno media para un modelo que te permite desde un uso urbano diario a disfrutar de rodadas en el Jarama. Por eso, como rutera estoy seguro que tendrá un consumo moderado y el asiento trasero, sin ser desde luego un sillón orejero al estilo de la estupenda rutera GTR1400 que tenía Kawasaki, puede probarlo con alguien conocido y, tras unas horas de ruta, me comunicó que no era demasiado incómodo.

Rutera aunque sin excesos, la pequeña cúpula que puedes ver en las fotos del día razonablemente bien el aire del pecho del piloto, aunque desde luego haría falta una más amplia si de verdad piensas hacer moto turismo con ella. Además, a ritmo de carretera vibra muy poco, aunque entre unas 6. 000 y 8. 000 vueltas que sientes vibraciones de baja intensidad en los puños.

La Kawasaki Z900 va tan bien como sus antecesoras. Mejor dicho, aún mejor gracias a la incorporación de novedades tecnológicas como la plataforma inercial o sus nuevas pinzas. La regulación del control de tracción es perfecta para un uso general como el de esta naked media.… Son suficientes para cubrir un uso no radicalmente deportivo, y además te hace la vida mucho más fácil. Además, esa sensación de facilidad de pilotaje para todo uso, desde diario al más sport, hace de esta Kawasaki Z 900 una moto en la que siempre estás dispuesto a montar y disfrutar. Además, habida cuenta de su calidad, su precio me parece realmente bueno y, ¡qué narices! Es que su diseño me encanta.

Sin duda, una excelente compra desde el momento en que tengas el carnet recién sacado en el bolsillo, para este año.

LIKE: diseño. Novedades técnicas y electrónicas 2025. Polivalencia y facilidad de pilotaje.

NO LKE: protección aerodinámica para uso turístico. Bomba de freno de serie versión básica.