Las motos están siendo multadas por aparcar en la acera en la zona céntrica de Madrid, pero básicamente no se sabe por qué ¿Parece increíble? Pues sí, pero está pasando.

Estamos en plenas Navidades, y el centro de las grandes ciudades se satura y, en principio, parece lógico pensar que la moto es la solución perfecta para llegar a esos saturados de tráfico con vehículos más ligeros, que contaminan menos y se aparcan mejor. Como siempre, los motoristas madrileños pensaban llegar a la zona de la Gran Vía y aparcar adecuadamente en la acera. La sorpresa ha saltado cuando, primero, el Ayuntamiento prohibió hacer esto ciertos días (28 en total), pero aún más grave es que han empezado a multar motos incluso fuera de los días acordados. Es un sinsentido digno de un capítulo de “La que se avecina”, y que intentamos explicaros.

En principio, habría que pensar qué persona, en un Ayuntamiento de una ciudad saturada como Madrid, se le ocurre crear esta prohibición para los vehículos más ligeros fáciles de mover y aparcar y que están menos tiempo con el motor arrancado, pero así ha sido. Se ha prohibido el aparcamiento en  zonas céntricas circundantes a la Gran Vía a  vehículos privados, da igual si hablamos de un pequeño ciclomotor, un Hummer de ocho cilindros o una gran furgoneta. Los días de prohibición eran:

-2 al 11 de diciembre

– fin de semana de 16 a 18 de diciembre

– 23 de diciembre 8 de enero de 2017.

No obstante, las motos al menos pueden acceder. El ayuntamiento de Madrid dice literalmente «podrán circular por las zonas limitadas al tráfico privado los residentes en las calles de acceso restringido o titulares de plazas de aparcamiento en las mismas, los taxis, motos y ciclomotores«. O sea, que aparte de los que viven allí, sólo podrán cruzar esas zonas transportistas de personas o cosas, motoristas y, por supuesto, las personas que vivan allí. Que quede claro: cruzar, no aparcar  en aceras ni en carriles específicos para peatones en toda la calle de la Gran Via, Red de San Luis y plaza de Callao, ni siquiera en en las zonas en que siempre se ha podido legalmentesin ningún problema como las aceras de más de 3 m. de ancho.

 

Todo sea por multar

Si esta prohibición ya parece un sinsentido en cualquier momento, pero más en períodos tan largos (28 días), la gran polémica llegado cuando se han registrado denuncias con sus correspondientes multas a motos aparcadas en la acera de forma habitualmente legal , fuera de esos días estipulados. Los Agentes de Movilidad parecen escudarse en que, efectivamente, se han instalado repentinamente placas que prohíben el aparcamiento de motos, pero como decíamos sólo los días acordados, no el día o el momento en que el guardia o el agente de movilidad decida.

Lógicamente, las quejas han empezado a llegar, y nadie el Ayuntamiento sabe explicar qué es lo que pasa, y por qué se están poniendo esas multas. No aparece ningún dato respecto en la web del ayuntamiento ni es fácil ponerse en contacto con ellos. No obstante, por lo que ha logrado trascender hasta el momento, parece que esta “operación multa” es una acción independiente de los Agentes de Movilidad, por lo que Ayuntamiento está pidiendo explicaciones que, en el momento de escribir esta noticia, no estaban ni mucho menos aclaradas.

Poniéndonos en contacto con policías municipales, nos han confirmado que, efectivamente, el ayuntamiento puede prohibir el acceso y aparcamiento de cualquier vehículo en cualquier zona y tiempo que considere adecuada- en zonas habitualmente permitidas, lógicamente, como es este caso- pero, especialmente en fechas y zonas de la que estamos hablando, avisando con tiempo y recogiéndolo en un acta previamenteno, no solamente poniendo una señal horizontal o pintada en el suelo.

¿Qué hacer?

Lógicamente, muchos afectados se siente literalmente “robados” por el Ayuntamiento, por la policía municipal o por algún estamento oficial, pero nadie parece tener nada claro el origen de esta ola de multas «ilegales» o al menos alegales. El Ayuntamiento aclara que las multas pueden ser recurridas, pero uno de los afectados nos ha declarado que “la misión de la policía es hacer bien su trabajo y no multar indiscriminadamente sin poder hacerlo, o sin saber si pueden hacerlo. Su misión es hacer bien su trabajo, y no obligarnos a todos a gestionar las multas que puede que ganemos o puede que no. En cualquier caso, nos pueden hacer perder tiempo y dinero por un error que no es nuestro, sino del ayuntamiento y/o de la policía municipal. En ponerte una multa no tarda nada, y menos en quitarte el dinero. Sin embargo, recurrir lleva mucho tiempo y esfuerzo a un particular.”. Básicamente, en el momento de escribir estas líneas, nadie parece saber quién ha sido el responsable legal de esta descoordinación de la que los motoristas han sido los grandes perjudicados sin ningún motivo.

Por otra parte, el Ayuntamiento de Carmena amenaza con que esta prohibición pueda ser permanente, por lo que el aparcamiento a la zona centro de Madrid puede quedar reducido total o parcialmentea vecinos, taxis u otro negocio de transporte, autobuses de turistas y reparto. Los demás, tendrán que acceder en transporte público si esta prohibición sigue adelante.