Una Kawasaki de superbikes, muy cercana la moto de serie, ¿puede ser más rápida que el Dios de MotoGP Valentino Rossi sobre su moto oficial? Pues parece ser que sí… Pero no todo es tan fácil.
La noticia más impactante del mundo motociclista más deportivo de esta semana ha sido que Jonathan Rea, el reciente campeón del mundo de Superbikes, ha hecho tiempos astronómicos en los entrenamientos conjuntos que equipos tanto de Superbikes como de MotoGP estaban disfrutando en el circuito de Jerez. No sólo astronómicos, sino que parecen increíbles.
Con un tiempo de 1:38.721- que hay que haber rodado alguna vez en ese circuito para hacerse un idea de lo que esto significa-bate el tiempo que el mismísimo “rey” Valentino Rossi hizo en la última carrera del Mundial celebrado allí mismo en abril. Y no sólo eso, sino que también fue más rápido que casi todos sus compañeros de pista en ese momento, entre los que estaban muchos de MotoGP. Vamos, que una moto prácticamente de calle ha sido capaz de ganar a uno de los pilotos más rápidos del mundo con una moto prototipo.
Puntualicemos
Claro que, como te imaginas, no todo es tan fácil. Primero, es que la Kawasaki era muy similar a la recién proclamada campeona del mundo con el piloto también reciente campeón, con lo cual su estado de forma y su capacidad de adaptarse a la ZX10 estaba en un momento óptimo. Por otro lado, los pilotos de MotoGP que estaban con él, casi todos estaban estrenando motos nuevas o con muchas modificaciones, con lo cual tampoco estaban en condiciones de rodar al 100 × 100.
Sin embargo, uno de los elementos que parece realmente definitivo para justificar esta “humillación” de las estratosféricas MotoGP frente a las más humanas y casi asequibles para todos Superbikes, es que Rea rodaba con los Pirelli de clasificación, ultra pegajosos aunque apenas duran dos vueltas, algo con lo que no contaban ni usaban los Michelin de MotoGP.
Buena muestra de la diferencia puntual de Jonathan Rea con el resto de los pilotos de Superbikes es que el segundo fue Chaz Davies con la Ducati a cuatro décimas, que son casi medio segundo y, por lo tanto, casi un universo en el mundo de las carreras. Por otro lado, el tercero fue Marco Melandri que, bien es cierto, acaba de volver al mundo de la competición, pero sigue siendo rápido y quedo a casi un segundo.
